Cambio de paradigma

Crónicas de la Conferencia Internacional de Transición 2012

29 Sep
por Transición Sostenible, en la categoría Artículos, Blog, Eventos, Noticias, Videos   |  6 Comentarios


Bajo el título «Construyendo resiliencia en tiempos extraordinarios», tuvo lugar en Londres, del jueves 13 al martes 18 de septiembre del 2012, la 6º conferencia internacional del movimiento de transición (transition towns).  En ella, coincidiendo con el record de deshielo en el Ártico, cientos de transicionistas de todo el mundo se dieron cita en un increíble festival con diferentes eventos, talleres y celebraciones, por y para la transición hacia un mundo más sostenible y resiliente. Y como no, entre los presentes se encontraba un grupo de representantes de la Red Española de Transición: Emilio Mula, Susana Martínez, Miguel Jiménez-Bravo, Alejo Etchart, Borja Izaola y el que escribe, Juan del Río. En breve espero poder poner la foto.

Son muchas las cosas que pasaron, muchas de ellas de manera paralela, y difícil hacer un resumen de todo. Sin embargo, y pese a las limítaciones, intentaré hacer una síntesis y aportar alguna reflexiones de lo sucedido adurante aquellos intensos y emocionantes 6 días en Londres. Para ello me he basado en el artículo original de Rob Hopkins, y mis propias experiencias y reflexiones. Intentaré facilitar los enlaces a los diferentes recursos resultado del encuentro aunque avanzo que la mayoría son en inglés. También decir, que este artículo está abierto a las valiosas aportaciones de mis compañeros de aventura, con correcciones, nueva información y perspectivas. Por tanto puede ir completándose en el futuro. Sin más, y pidiendo disculpas por posibles errores, comencemos.

Jueves 13/09/2012

El Jueves comenzó el primer día del curso de formación «Thrive» en el que participaron 35 personas de todo el mundo. Este curso está diseñado para ayudar a iniciativas de transición que ya tienen cierto recorrido y que necesitan de nuevas herramientas para avanzar a medida que profundizan en el proceso de cambio. No pude asistir, así que poco puedo contar, pero por los comentarios resultó muy interesante, especialmente el segundo día (viernes) donde se trabajaron resolución de conflictos en grupos y problemas de financiación.

Viernes 14/09/2012

El viernes fue un día lleno de actividad, comenzando paralelamente con el segundo día del curso Thrive, y con dos importantes eventos: el Encuentro de Juventud y Transición y el Reconomy Project Day.

En el Encuentro de Juventud y Transición, con unos 50 participantes la mayoría en torno a la veintena, se trabajó sobre las problemáticas de la juventud para involucrarse en procesos de transición y se presentó el proyecto «1 año en transición«, que busca que jóvenes lleven a cabo estancias en iniciativas de transición alrededor de Europa. Por la mañana se realizaron varias charlas de introducción a la transición, economía alternativa y un emocionante discurso a cargo de Lee Brain, hijo de un productor de petróleo a partir de arenas bituminosas de Canadá. Por la tarde se realizó una dinámica de debate world café, sobre cómo imaginar la transición. La tarde acabó con una serie de mini charlas sobre temas de los mas variados, desde ciudades libres de publicidad a presentaciones de diferentes proyectos.

Para más información podéis leer los siguientes post en inglés de Carolin Jackson y Kerry Lane

El Reeconomy project Day, con más de 100 participantes, se centró en nuevos modos de economía alternativa, principalmente desde el enfoque de la empresa social y la organización. Por la mañana se realizaron interesantes charlas de 7 minutos sobre proyectos innovadores en torno a la producción local de alimentos o energía, la recuperación de habilidades, etc. Dos ejemplos son los proyectos Increibles y Comestibles sobre producción local de alimentos o Transition Granja Viana desde Sao Paulo. Mas tarde y durante el resto de la jornada se realizaron talleres participativos sobre crowdfunding (microfinanciación colectiva o micromecenazgo) y diferentes estratégias económicas, como cooperativismo, incubadoras sociales, monedas alternativas, etc.

Aquí podéis escuchar todos los audios de REconomy Day , leer las reflexiones de Jay Tompt

También el artículo de Carlos Fresneda «Reimaginar la Economía» realizado a partir del REconomy Day.

Posteriormente, a las 19h y con grandes aplausos y sonrisas, comenzó una importante celebración: el lanzamiento del Transition Free Press, el nuevo periódico gratuito del Movimiento de Transición.

Para finalizar a las 20h comenzó oficialmente la conferencia del año 2012. Breves introducciones a cargo de Peter Lipman, presidente de la Transition Network, Rob Hopkins cofundador del movimiento y David Micklem, director del BAC, el centro de arte donde se realizó la conferencia. Seguidamente dos participantes del encuentro de juventud y del REconomy day hicieron un resumen de los mismos.

Por último se realizaron diferentes dinámicas de mapeo en las que se vio el gran número de participantes que venían de fuera del Reino Unido, la más internacional hasta el momento. La jornada finalizó alegremente en el bar

Aquí podéis ver el programa de la conferencia. Podéis leer las reflexiones de Ann Owen sobre porqué esta es una conferencia especial y diferente.  Todas las fotografías del viernes pueden verse aquí

Sabado

El sábado comenzó de lleno la conferencia y lo hizo formando «Home groups», grupos de 4 personas que se reencontraría a lo largo de la conferencia y al final para las reflexiones. A continuación se explicó el funcionamiento del «foro abierto» (open space) que es la dinámica de debate que se realizaría a la tarde, y se invitó a la gente a proponer temas sobre los que discutir, siempre bajo el lema «construyendo resiliencia en tiempos extraordinarios».

Después fue el momento de los talleres, 23 talleres de hora y media repartidos en 2 rondas una por la mañana y otra por la tarde. Desde luego la elección fue difícil. Talleres de lo más variado: resolución de conflictos, producción de alimentos locales, liderazgo, monedas sociales, transición en tiempos de austeridad, etc.

Aquí podéis ver los diferentes talleres que se llevaron a cabo. Y algunos audios y artículos sobre los siguientes talleres:

Como hacer una cultura sana y feliz, y porque no lo hacemos

Trayendo el poder a la gente

Manejando el conflicto

Comunicando transición

Localismo

Transición en tiempos de austeridad

Este último taller, en el que participé junto a Rob Hopkins y Filipa Pimentel fue el que más participación tuvo el sábado. En él, presentamos brevemente la realidad de dos paises donde la situación económica está haciendo que la transición emerja de una manera diferente al contexto anglosajón o de los países sin graves problemas económicos, para después crear grupos de discusión. Los objetivos eran informar sobre lo que está pasando a nivel de transición en países en crisis, comparar diferentes contextos y sacar ideas que puedan servir para procesos de transición en lugares con pocos recursos económicos. Surgierón reflexiones interesantes como la del plan de descenso monetario participativo y se habló mucho de la economía del don o del regalo. Más adelante, si tengo tiempo, realizaré un artículo con las conclusiones del taller.

Por la tarde se realizó el foro abierto, en el que la diversidad de mesas de discusión fue increíble. Dos rondas de una hora cada una con cerca de 50 temáticas.

Aquí podéis leer a Anne owen hablando de su mesa de discusión sobre cómo se encuentra el balance entre la necesidad de trabajo y la economía del regalo.

Ese mismo día y mientras se realizaba el foro abierto, en Madrid se realizó un evento llamado TEDx Madrid, en que Rob realizó una entrevista y tuve la oportunidad de participar unos instantes. La transición llega a Madrid.

De momento no está el video pero aquí una pequeña foto.

La jornada continuó con la segunda ronda de talleres.

Después de tanto trabajo mental fue momento de relajarse y celebrar. Momentos para desconectar, cena, actuaciones de humor, poesía y música alegre y animada con la que bailar!

Podéis ver las fotos del sabado aquí: 1, 2, 3

Domingo

El domingo nadie (salvo los organizadores claro está) sabía muy bien que iba a pasar, había mucho misterio al respecto, y mereció la pena. Lo que vivimos fue un los proceso de grupo fascinante, que nos llevó a visualizar, construir físicamente y experimentar una posible comunidad sostenible del futuro. Usando como espacio la gran sala del Battersea Art Centre, con unas cuantas pizaras y tizas, materiales reciclados y mucha imaginación y creatividad, trabajamos durante 4 horas llenas de cooperación, emociones y diversión.

El procerso (Transition High Street Group Process) comenzó con los vecindarios, identificando cuáles eran sus necesidades básicas así como los principales elementos de su economía local. Se identificaron cuales eran las actividades que debian realizarse en la comunidad, que tipo de negocios, etc y que relaciones debian de existir entre ellos. Después los participantes se fueron agrupando por necesidades y eligiendo que querían ser en esa nueva comunidad.

Entonces a lo largo de una gran calle principal se fueron construyendo con materiales reciclados (cartón, periódicos, bambú, …) los diferentes espacios y poco a poco la comunidad empezó convertirse en un ser vivo. Que si una carpinteria, un huerto local, una granja solar, un grupo de música o una escuela. Toda la gente moviéndose para conocer los diferentes espacios, interactuar con el resto, perderse en este nuevo mundo, bailar y comer pan y beber cerveza imaginaria. Finalmente la comunidad fue inaugurada y la comida fue un maravilloso y festivo picnic en ella.

Fue realmente mágico y espero podamos experimentar y realizar ese tipo de dinámicas en otros encuentros futuros. Desde luego ese proceso merece un artículo por si solo.

Aquí podéis ver las fotografías de esa mañana, y escuchar el audio.

Después del picnic, de manera autoorganizada y como pequeño ejército de hormigas, se desmontó la pequeña ciudad que acabábamos de construir, asombroso lo rápido que lo hicimos. Posteriormente hicimos una evaluación de todo lo vivido hasta el momento, primero en los pequeños «home groups» que se habían creado al comienzo de la conferencia y posteriormente en una sesión entre todos los participantes. Sophy Banks, Rob Hopkins, Peter Lipman realizaron una pequeña charla de despedida.

Finalmente acabamos con un bonito video titulado «esta fue tu conferencia» con imágenes, música y citas surgidas durante el fin de semana.

La conferencia del 2012 cerró con una canción en grupo dirigida por Inez Aponte y se limpio el espació entre todos, aquí podéis leer unas reflexiones sobre el proceso de limpieza de Mark Whatson.

Las fotos del domingo podéis verlas aquí: 1, 2, 3

Aquí podéis escuchar todos los audios reunidos y ver las fotografias.

Lunes y Martes

El lunes y martes fueron dos días destinados a trabajar entre los diferentes grupos coordinadores (Hubs) de transición de diferentes países. Sobre como podíamos coordinarnos y empezar a construir una verdadera red internacional. La red internacional de hubs, coordinada magníficamente por Filipa Pimentel, surgió en la anterior conferencia de transción, en Liverpool 2011, pero no fue hasta este año cuando se realizó el primer encuentro específico con este fin. Fue muy importante para conocernos, ver cuáles eran nuestras necesidades, situación y potenciales y empezar a construir grupos de trabajo y una verdadera familia internacional.

La mañana del lunes fue abierta a todo el mundo, fuimos unas 40 personas de aproximádamente 20 nacionalidades, y se centro en conocernos. En ella pudimos observar la gran diversidad de contextos, desde países ricos a otros mucho mas pobres, madurez del movimiento, desde países con mas de 200 iniciativas a paises con 3, países sin hub otros con una hub consolidado, etc.

La tarde del lunes, con un grupo algo mas reducido se realizó una dinámica entre World Café y Open Space dirigida a trabajar sobre aspectos importantes de la organización de dicha red: Toma de decisiones, estructura, apoyo entre grupos, financiación. etc

La mañana del martes sirvió para acabar trabajar las conclusiones del día anterior, crear grupos de trabajo y seguir conociendonos y haciendo familia. Familia aun muy joven, que justo empieza a dar sus primeros pasos, y que espera ir consolidándose y creciendo. Es importante decir que fuimos en todo momento conscientes de que hay países que por motivos de distancia y otros, no pudieron estar con nosotros. De alguna manera deciros que estuvisteis también presentes, que existe el ánimo de ser lo más integrador e inclusivo posible buscándose canales de participación y que os llegará la información resultado de esos dos días de trabajo.

Reflexiones

Esta conferencia ha sido la más amplia e internacional hasta el momento, 6 días que abarcaron aspectos y ámbitos de lo más diverso. La transición esta cada vez llegando a más lugares, internacionalizándose, adaptándose a nuevas realidades y madurando, y este increíble encuentro es muestra de ello. Una gran variedad de talleres, que cada vez más, acerca la transición de contextos no anglosajones. Unas dinámicas realmente elaboradas, principalmente la mágica mañana del domingo. Un equipo organizador y documentador increíble (¡Gracias!). Y un conjunto de participantes venidos de todo el mundo con unos conocimientos y experiencias de lo más enriquecedores. Fue una conferencia llena de momentos para recordar y seguramente un punto de inflexión en el movimiento a nivel internacional.

Los retos que se abren son muchos: como poder trabajar hacia la transición en países de situación en crisis económica, como poder conectar las experiencias de diferentes países y contextos, como hacer que el discurso y las herramientas del movimiento de transición evolucionen en estos momentos de cambio, como fomentar nuevos modelos económicos, como hacer todo esto apoyándose unos a otros y disfrutando del proceso, como internacionalizar el movimiento de transición, llegando a nuevos lugares, en nuevos idiomas y construyendo una red realmente internacional, como construir puentes que nos unan a otras propuestas e iniciativas (decrecimiento, slow movement, ecoaldeas, 15M, etc), como aplicar lo aprendido en nuestras iniciativas, como fortalecer el nuevo eje de transición del estado español, etc. Pues bien, la conferencia nos muestra que estamos en ese camino. ¡Recordemos que la transición no es mas que un experimento!

También decir, que para el recién creado Eje de Transición del Estad Español, haber estado presente ha sido de gran importancia, por lo aprendido, los contactos y redes creadas, la inspiración y porque eso nos ha permitido conocernos más y comenzar a fortalecer nuestra propia familia. Desde aquí un abrazo a cada uno de ellos y tambien a todas aquellas personas interesadas que no pudieron asistir. Ha sido fantástico ver de nuevo a tan buenos amigos de tantos lugares y hacer muchos nuevos. Así que, ¿nos vemos el próximo año?

Juan del Río

Economía Sagrada: Dinero, Obsequio, y Sociedad en la Era de Transición

08 Sep
por Transición Sostenible, en la categoría Artículos, Blog, Videos   |  7 Comentarios

«Sacred Economics» o Economía Sagrada se trata de un nuevo concepto que apuesta por la economía del obsequio y que da nombre al último e interesantísimo libro de Charles Eisenstein. Dicho libro traza la historia del dinero desde las antiguas economías del obsequio hasta el capitalismo moderno, revelando cómo el sistema ha contribuido a la separación, competencia y escasez, destruido a la comunidad y necesitado un crecimiento sin fin. Hoy, estas tendencias han alcanzado el extremo–pero en la víspera del colapso, podemos encontrar una gran oportunidad para transitar hacia una forma de ser más conectada, ecológica y sustentable.

A continuación podeis leer la introducción de libro «Economía Sagrada: Dinero, Obsequio, y Sociedad en la Era de Transición» gracias a la traducción de Jorge Espinosa.

El libro se puede leer integro online y en inglés aquí

Economía Sagrada: Dinero, Obsequio, y Sociedad en la Era de Transición

Introducción

El proposito de este libro es convertir el dinero y la economía humana en cosas tan sagradas como todo el resto del universo.

Hoy en día asociamos al dinero con lo profano, y con buena razón.  Si hay algo sagrado en este mundo, seguramente no es el dinero.  El dinero parece ser el enemigo de nuestros mejores instintos, algo que se nos vuelve muy claro cada vez que un impulso hacia la generosidad y la gentileza es bloqueado por la idea de “no me alcanza.”  El dinero parece ser enemigo de la belleza, como lo demuestra el peyorativo “vendido.”  El dinero parece ser enemigo de toda valiosa reforma social o política a medida que el poder corporativo maneja legislaciones hacia el incremento de sus ganancias.  El dinero parece estar destruyendo la tierra, a medida que saqueamos oceanos, bosques, suelos, y especies para alimentar una avaricia que no conoce límite.

Desde por lo menos la vez que Jesus sacó a los cambiadores de moneda del templo, hemos sentido que hay algo impuro en el dinero.  Cuando los políticos buscan dinero por encima del bien común los llamamos corruptos.  Adjetivos como “sucio” e “inmundo” naturalmente describen al dinero.  Se espera que los monjes tengan poco que ver con él: “No podéis servir a Dios y a Mammón.”

Al mismo tiempo, es innegable que el dinero tiene una cualidad misteriosa y mágica tambien, el poder de alterar el comportamiento, y coordinar la actividad humana.  Desde tiempos antiguos los pensadores se han maravillado con la habilidad que tiene una simple marca de conferir este poder a un disco metálico o un pedazo de papel.  Lamentablemente, si vemos a nuestro alrededor, es difícil no concluir que la magia del dinero es una magia malvada.

Por supuesto, si vamos a convertir el dinero en algo sagrado, nada menos que una revolución del orden mayor bastará, una transformación de su naturaleza esencial.  No sólo son nuestras actitudes acerca del dinero que deberán cambiar, como algunos gurús de la auto-ayuda nos quieren hacer creer; masbien deberemos crear nuevos tipos de dinero que encarnen y refuercen las actitudes cambiadas.  Economía Sagrada describe este nuevo dinero y la nueva economía que se consolidará a su alrededor.  También explora la metamorfosis de identidad humana que es tanto causa como resultado de la transformación del dinero.  Las actitudes cambiadas que menciono llegan al corazón de lo que es ser humano: incluyen nuestra comprensión del propósito de la vida, el papel que desempeña la humanidad en el planeta, la relación del individuo a la comunidad humana y natural; hasta lo que és ser un individuo, un ser.  Despues de todo, tenemos la experiencia del dinero y (la propiedad) como extensión de nosotros mismos; por ende el pronombre posesivo “mío” para describirlo, el mismo que usamos para identificar nuestros brazos y cabeza.  Mi dinero, mi auto, mi mano, mi hígado.  Consideremos tambien el ultraje que es para nosotros el que nos despojen de él, (“ripped off” en inglés describe tanto que le arranquen a uno algo, como el ser estafado) tal y como si una parte de nuestro ser hubiese sido tomada.

Una transformación de profano a sagrado para el dinero-parte tan íntima de nuestra identidad, tan central al funcionamiento del mundo-repercutiría de manera muy profunda en verdad.  Pero qué significa para el dinero, o para cualquier cosa que venga al caso, ser sagrado?  En un sentido crucial es lo opuesto a lo que sagrado ha llegado a significar.  Durante varios miles de años, los conceptos de sagrado, santidad y divinidad se han referido más y más a algo fuera de la naturaleza, el mundo, y la carne.  Hace tres o cuatro mil años los dioses comenzaron a migrar de los lagos, bosques, ríos y montañas hacia el cielo volviéndose señores imperiosos sobre la naturaleza, en lugar de conformar la mera esencia de ésta.  A medida que la divinidad se separó de la naturaleza, tambien se volvió pecaminoso involucrarse demasiado con los asuntos del mundo.  El ser humano dejó de ser alma viva, encarnada, y se convirtió en envoltura profana, un receptáculo del espíritu y nada más, culminando en mota de conciencia Cartesiana observando el mundo sin participar en él, y el Dios-relojero Newtoniano, igual.  Ser divino se volvió ser supernatural, inmaterial.  Si Dios participaba en el mundo, era por medio de milagros-intercesiones divinas que violaban o supercedían las leyes de la naturaleza.

Paradójicamente, esta cosa foránea y abstracta llamada espíritu se supone ser lo que anima al mundo. Preguntémosle al religioso qué es lo que cambia cuando alguien muere y dirá que el alma se ha ido del cuerpo.  Preguntenle qué hace caer a la lluvia y soplar al viento, dirá que es Dios.  Para estar seguros, Galileo y Newton aparentan haber quitado a Dios del funcionamiento cotidiano del mundo, explicándolo como el relojeo de una máquina vasta de masa y fuerza impersonal, pero aún necesitan al Relojero que le da cuerda en un principio, e impregna al universo con la energía potencial con la que funciona desde entonces.  Hoy en día, este concepto sigue en pie como el Big Bang, evento primordial fuente de la “entropía negativa” que permite el movimiento y la vida.  En todo caso, nuestra noción cultural de “espíritu” es que es algo aparte y no mundano, pero que puede intervenir milagrosamente en asuntos materiales, y que hasta los anima y dirige de manera misteriosa.

Es sumamente irónico y de gran significancia que la única cosa en el planeta que más se aproxima al predominante concepto de lo divino es el dinero.  Es una fuerza inmortal e invisible que rodea y conduce todo, omnipotente y sin límites, una “mano invisible” que, como se dice, hace girar al mundo.  Pero el dinero actualmente es una abstracción, cuando mucho: símbolos sobre papel, pero usualmente dígitos binarios en un ordenador.  Existe en una dimensión remota y lejana del mundo material.  Allí está exento de las leyes mas importantes de la naturaleza, ya que no decae ni vuelve al suelo como todo lo demás, se conserva más bien, incambiable, en sus bóvedas y archivos digitales, hasta creciendo con el tiempo gracias al interés.  Tiene las propiedades de preservación eterna e incremento sin fin, ambas cosas profundamente no naturales.  La sustancia natural que más se le asemeja es el oro; inoxidable, no se mancha ni decae.  Por esto se usó el oro como dinero, y como símbolo del alma divina, que es incorrompible e incambiante.

Esa propiedad divina de abstracción que tiene el dinero, su desconección del mundo de cosas verdaderas, alcanzó su extremo en los primeros años de el siglo XXI  cuando la economía financiera perdió su anclaje en la economía de verdad y tomó vida propia.  Las vastas fortunas de Wall Street se desconectaron de cualquier producción material, pareciendo existir en una realidad aparte.

Sobremirando desde sus alturas Olympianas, los financieros se hacían llamar “amos del universo,” canalizando los poderes de su dios para dar fortuna o ruina a las masas, literalmente moviendo montañas, destruyendo bosques, cambiando el curso de los ríos, y causando el subir y caer de naciones enteras.  Pero el dinero mostró ser un dios caprichoso.  En lo que escribo estas palabras, parece que los ritos desesperados del sacerdocio financiero para aplacar al dios Dinero son en vano.  Como el clero de una religión que está a punto de morir, exigen a sus seguidores mayores sacrificios, mientras culpan por sus desfortunas al pecado (la avaricia de los banqueros y la irresponsabilidad de los consumidores) o los caprichos misteriosos de Dios (los mercados financieros).  Pero hay algunos que ya están culpando a los mismos sacerdotes.

Lo que llamamos recesión, una cultura anterior pudo haber llamado “Dios abandonando al mundo.”  El dinero está desapareciendo, y con él otra propiedad del espíritu: la fuerza animadora del ámbito humano.  Al escribir esto, todas las máquinas en el mundo están en desuso.  Las fábricas se han detenido, los equipos se oxidan en los sitios de construcción; parques y bibliotecas cierran, millones hay sin techo ni comida, mientras las unidades de vivienda siguen vacantes, y la comida se pudre en los almacenes.  Pero todos los insumos materiales y humanos para construir las casas y distribuir los alimentos aún existen.  Es más bien algo immaterial, el espíritu animador, que ha huido.  Lo que se ha fugado es el dinero.  Es lo único que falta, tan insustancioso (en su forma de electrones en computadoras) que apenas se puede asegurar que existe, y tan poderoso que sin él la productividad humana se detiene por completo.  A nivel individual tambien, podemos ver los efectos desmotivadores de la falta de dinero.  Consideremos el estereotipo del hombre desempleado, casi en la quiebra, recostado frente al televisor en su ropa interior, tomándose una cerveza, con apenas las fuerzas para levantarse de su asiento.  El dinero, al parecer, anima tanto a la gente como a las máquinas.  Sin él estamos desanimados o sin espíritu. 

No nos damos cuenta que nuestro concepto de la divinidad ha atraido a si un dios que le encaja perfectamente, y le ha dado soberanía sobre la tierra.  Al divorciar al alma de la carne, al espíritu de la materia, y a Dios de la naturaleza, hemos instaurado un poder soberano desalmado, enajenador, ni divino, ni natural.  Así que cuando hablo de consagrar al dinero, no invoco agentes supernaturales que le infundan santidad a los objetos inertes y mundanos de la naturaleza.  Mas bien, estoy regresando a un tiempo pasado, que predata este divorcio entre materia y espíritu, tiempo en el cual la santidad era endémica a toda cosa.

Y que es lo sagrado?  Tiene dos aspectos: la unicidad y la relación.  Un objeto o ser sagrado es aquel que es especial, singular, único en su categoría.  Por eso es infinitamente preciado; es irremplazable.  No tiene equivalente, ni ningún “valor” finito, ya que el valor solo se determina por comparación.  El dinero, como toda medida, es un estándar de comparación.

Por único que sea, lo sagrado es inseparable de todo lo que contribuyó a su manifestación, de su historia, y del lugar que ocupa en la matriz de la existencia.  Pueden estar pensando que realmente toda cosa y toda relación es sagrada.  Eso podrá ser muy cierto, pero aunque lo creemos a nivel de intelecto, no siempre lo sentimos.  Algunas cosas las percibimos como sagradas y otras no.  Las que si, las llamamos sagradas, y su propósito es recordarnos la santidad de toda cosa.

En la actualidad, vivimos en un mundo despojado de santidad, y pocas cosas nos hacen sentir que vivimos en un mundo sagrado.  La producción en masa y estandarización de “commodities,” las casas prefabricadas, los paquetes idénticos de los alimentos, las relaciones anónimas con funcionarios institucionales, niegan la unicidad en el mundo.  Los origenes distantes, el anonimato de las relaciones, la invisibilidad de las consecuencias en la producción y el descarte de nuestra mercancía niegan la interconnección y la relación.  Así pues vivimos sin tener experiencia de lo sagrado.  Y de las cosas que niegan la unicidad y la relación, el dinero está a la cabeza.  La idea de la moneda tuvo su origen en la estandarización y así cada dracma, shéquel, y yuan fueran en función idénticos.  Además como medio de intercambio universal y abstracto, el dinero está divorciado de sus orígenes, de su conección a la materia.  Un dólar es el mismo dólar sin importar de donde se obtuvo.  Pensaríamos que alguien es inmaduro si pusiera una suma de dinero en el banco y la retira al mes quejándose que “éste no es el dinero que deposité!  Son otros billetes!”

Por consiguiente una vida monetizada es una vida profana puesto que el dinero y las cosas que compra no cuentan con las propiedades de lo sagrado.  Que diferencia hay entre un tomate comprado en  el supermercado y un tomate producido en la huerta de mi vecino que recibí como obsequio?  O una casa prefabricada y una casa construida por alguien que me conoce a mi y la vida que llevo?  Las diferencias son marcadas por las relaciones únicas de quien da y quien recibe.  Cuando la vida está llena de cosas así, hechas con cariño, conectadas por una red de gente y personas conocidas, es una vida plena, enriquecedora.  Hoy en día vivimos bajo una avalancha de monotonía e impersonalidad.  Hasta los productos hechos a la medida, si son producidos en masa, solo ofrecen unas pocas permutaciones de los mismos bloques estándares.  Esta monotonía entumece el alma y abarata la vida.

La presencia de lo sagrado es como retornar a un hogar que siempre estuvo allí, a una verdad que siempre existió.  Puede darse al observar una planta o insecto, o escuchar una sinfonía de aves o ranas, el sentir lodo entre los dedos de los pies, contemplar un objeto hermoso, reconocer la complejidad imposiblemente coordinada de un ecosistema o una célula, presenciar una sincronicidad en la vida, ver niños jugar, o quedar conmovido con una obra maestra.  Extraordinarias experiencias que de ninguna manera se separan del resto de la vida, más bien su poder se deriva de la vista que dan a un mundo más real, un mundo sagrado que existe en paralelo y en compenetración con el nuestro.

Que son este “hogar” y esta “verdad?”  La verdad de la unidad y relación entre todas las cosas, el sentir que participamos en algo mas grande que uno mismo, que al mismo tiempo es uno mismo.  En la ecología, es el principio de la interdependencia: que todos los seres dependemos para la supervivencia de la red de otros seres que nos rodea, y se extiende a incluir a todo el planeta.  La extinción de una especie disminuye nuestra plenitud, nuestra salud, nuestro ser: algo de nuestro propio ser se está perdiendo.

Si lo sagrado es el portal hacia la unidad inherente de todas las cosas, es igualmente un portal a la unicidad y especialidad de cada cosa.  Un objeto sagrado es único; conlleva una esencia única que no puede ser reducida a un set de cualidades genéricas.  Por eso la ciencia reduccionista parece despojar al mundo de santidad, ya que todo se vuelve una u otra combinación de un puño de bloques genéricos.  Este concepto refleja nuestro sistema económico, que consiste primordialmente de commodities genericos, estandarizados, descripciones de puestos de trabajo, procesos, datos, insumos, productos, y dinero-el componente mas genérico y el colmo de la abstracción.  En tiempos pasados no fue así.  Las tribus veian a cada ser no como un miembro de una categoría, pero como un individuo único y con espíritu.  Hasta las piedras, nubes, y gotas de agua aparentemente idénticas se reconocían como seres únicos y con capacidad de sentir.  Los productos de la mano humana eran únicos tambien, y expresaban a través de sus irregularidades distintas la firma de su creador.  Éste era el vínculo entre las dos cualidades de lo sagrado, la relación y la unicidad: objetos únicos que retienen la marca de su origen, su lugar único en la gran matriz del ser, su dependencia en el resto de la creación para su existencia.  Los objetos estandarizados, la mercancía commodity, son uniformes y desarraigados de toda relación.

En este libro describo la visión de un sistema monetario y economía sagrada que encarnen la interrelación y la unicidad de toda cosa.  No existirá en separación real ni percibida de la matriz natural en que se basa.  Reune los divorciados entornos de humanidad y naturaleza, es extensión de la ecología, obediente a sus leyes, y conllevando toda su belleza.

En cada institución de nuestra civilización, por fea o corrupta, se encuentra la semilla de algo hermoso: la misma nota en una octava mayor.  El dinero no es excepción.  Su propósito original es sencillamente conectar dones humanos con necesidades humanas, para que podamos todos vivir en abundancia mayor.  Cómo en vez llego el dinero a generar escasez en lugar de abundancia, y separación en vez de conección, es uno de los hilos de este libro.  A pesar de lo que se ha vuelto, en esa idea original del dinero como agente de obsequios reluce lo que un día lo tornará sagrado.  Reconocemos el intercambio de obsequios o dones como ocasión sagrada, por lo cual instintivamente hacemos del intercambio de regalos una ceremonia.  El dinero sagrado será entonces un medio para obsequiar, una manera de empapar a la economía global del espíritu prodigo y dadivoso que gobernó culturas tribales y pueblerinas, y que rige los intercambios que se dan por encima de la economía monetaria.

Economía Sagrada describe este futuro y marca una ruta práctica a seguir.  Hace mucho me cansé de los libros que critican un aspecto de la sociedad sin ofrecer alternativa positiva.  Luego me cansé de libros con alternativas positivas imposibles de alcanzar: “Debemos reducir las emisiones de carbono en un 90 porciento.”  Luego me cansé de libros que ofrecían maneras de llegar, sin describir lo que yo, en lo personal, puedo hacer para lograrlo.  Economía Sagrada opera en los cuatro niveles: ofrece un análisis fundamental de lo que ha fallado con el dinero; describe un mundo mas hermoso basado en otro tipo de dinero y economía; explica las acciones colectivas que son necesarias para para crear ese mundo y los medios por cuales estas acciones se pueden dar; y explora las dimensiones personales de la transformación mundial, el cambio en identidad y ser que yo llamo “vivir en el obsequio.”

Una transformación del dinero no es panacéa para todos los males del mundo, ni debe tomar prioridad sobre otras áreas de activismo.  Un reordenamiento de la información en las computadoras no quita la devastación social y material que azota al planeta.  Aun así, el trabajo de sanar en cualquier otro ámbito nunca alcanzará su potencial sin una correspondiente transformación del dinero, ya que está profundamente entretejido con las instituciones y costumbres de nuestra vida.  Los cambios económicos que describo son parte de un cambio vasto que abarca todo y no deja un solo aspecto de la vida sin tocar.

La humanidad apenas comienza a despertar a la verdadera magnitud de la crisis que enfrentamos.  Si la transformación económica que describo parece milagrosa, es porque nada menos que un milagro es lo que se necesita para sanar al mundo.  En todo ámbito, desde el dinero a la recuperación ecológica, la política, la tecnología, y la medicina, necesitamos soluciones que excedan los límites actuales de lo posible.  Afortunadamente, a medida que el mundo antiguo se desmorona, nuestro conocimiento de lo posible se expande, y con ello nuestra valentía, y voluntad para actuar.  La convergencia actual de crisis en dinero, energía, educación, salud, agua, suelo, clima, política, el ambiente, y demás es una crisis de nacimiento, del mundo antiguo a uno nuevo.  Inevitablemente, estas crisis invaden vidas personales, nuestro mundo se desborda, y tambien nacemos a un nuevo mundo y a una nueva identidad.  Por eso tantos sienten una dimensión espiritual tras la crisis global, y la crisis económica inclusive.  Sentimos que no volveremos a lo “normal” y que nacemos a una nueva normalidad: un nuevo tipo de sociedad, una nueva relación a la tierra, y una nueva experiencia de ser humano.

Dedico todo mi trabajo a ese mundo mas hermoso el cual nuestros corazones nos dicen es posible.  Digo nuestros “corazones” ya que nuestras mentes a veces nos dicen que no es posible.  Nuestras mentes dudan que las cosas serán diferentes a lo que nuestra experiencia nos enseña.  Talvez has sentido una ola de cinismo, desdén, o desesperación al leer mi descripción de una economía sagrada, o las ganas de tachar mis palabras como perdidamente idealistas.  Hasta yo sentí la tentación de atenuar mi descripción, para hacerla más probable, más rsponsable, y más en línea con nuestras bajas expectativas de lo que la vida y el mundo pueden ser.  Pero tal atenuamiento no hubiera sido veraz.  Lograré, usando las herramientas de la mente, comunicar lo que lleva mi corazón.  En mi corazón sé que  es posible crear una economía y una sociedad así de hermosa-es más, cualquier cosa menor sería  indigna.  Acaso estamos tan quebrantados que aspiraríamos a menos que un mundo sagrado?

Volviendo a la vida – crónicas del primer curso de ecología profunda.

22 Ago
por Transición Sostenible, en la categoría Artículos, Blog, cursos, Eventos, Sin categoría   |  Sin comentarios

Todo empezó un soleado viernes de finales de Junio. Mas Franch, un precioso proyecto comunitario y ecologíco en la Garrotxa (Gerona), fue recibiendo de manera pausada y acogedora a las casi 30 personas, que venidas de los lugares mas diversos, llegaban algremente para convivir y experimentar conjuntamente, y durante los siguientes tres dias, los principios de la Ecología Profunda.

Así fue como comenzó el primer curso de Ecología Profunda sobre el «Trabajo que Reconecta» de Joanna Macy realizado en castellano en el Estado Español. Curso organizado por Transición Sostenible, que tuvo lugar los dias 29 y 30 de Junio y 1 de Julio del 2012 y en el que hubo momentos para todo. Experiencias intensas, reconexión entre las personas y la naturaleza, risas, baile, creatividad, contemplación y hasta baños a la luz de la luna (con canto orquestral de ranas de fondo) en la piscina ecológica de Mas Franch.

El curso fue facilitado por Clairre Carré y Anne Amblés y llevo a los participantes, mediante dinámicas y juegos realizados en la magnífica sala de Bioconstrucción o en la naturaleza, a través de un profundo viaje en espiral por las 4 fases del trabajo de Joanna Macy.

Este primer curso fue todo un éxito con él se abre una nueva puerta, acercando estas necesarias herramientas para trabajar la transición interior a nuestro territorio. Se esta creando un grupo de trabajo sobre el tema, y este puede ser el primero de muchos cursos por llegar. Además cabe mencionar que en su organización se utilizaron ideas creativas (diferentes metodos de intercambio)  para que participantes con pocos recursos pudiesen  realizar el taller, lo que supone un éxito en sí mismo.

Pues bien, todo esto ha sucedido gracias a toda una conjunción de muchos factores que permitieron que emergiera algo tan incríble. Gracias a los participantes, por aportar su cabeza, manos y corazón a lo largo de los tres dias. A Mas franch por el lindo lugar, su sabrosa comida y su acogida, a las formadoras por su buena guía a lo largo del viaje, a los organizadores por su gran trabajo y a la naturaleza por estar ahí comunicandose y compartiendo con todas nosotras. Gracias a todas.

El detalle de las dinámicas realizadas se puede encontrar aquí gracias a los apuntes tomados por Núria Gago. Gracias Núria.

Las preciosas fotografias del curso se pueden encontrar aquí. Gracias a Carlotta Cataldi por su trabajo.

Si quieres saber más sobre Ecología Profunda y el trabajo de Joanna Macy.

Grecia: regreso a la tierra

03 Ago
por Transición Sostenible, en la categoría Artículos, Blog, Entrevistas   |  1 Comentario

La gente de Grecia, país mediterraneo que padece los efectos de una crisis terrible, está buscando alternativas a un modo de vida que se desmorona día tras día. Muchas cosas estan sucediendo allí y mucho podemos aprender de ello, sin embargo intencionadamente apenas nos llega información. Pero no siempre es así, y en esta ocasión Miguel Jiménez, compañero del Eje de Transición, nos acerca este interesante documento: «Grecia: regreso a la tierra». Un programa emitido el 9.6.12 por la cadena de radio francesa France Culture, bajo la rúbrica Terre à Terre. En el se entrevistan a 5 personas que trabajan en alternativas a la crisis en Grecia, en el proceso de transición hacia otro modo de vida. Que buscan reconstruir resiliencia en sus comunidades y que estan trabajando en la vuelta al campo. Gracias Miguel por enviarnoslo y por tu gran traducción.

Sin más pasamos a tan interesantes testimonios de este increible proceso de transción.

Entrevistas a:
Panagyotis Saïnatoudi, fundador de la red Peliti para el intercambio de semillas
Hélène Theodorakis, agricultora
Aris Pavlos, miembro de la red PELITI en la isla Egina
Antonis Diamantidis, permacultor
Roxane Mitralias, consejera en cuestiones agrícolas

PANAGYOTIS SAÏNATOUDI (PARANESTI)

Terre à Terre, información sobre el medio ambiente, por France Culture ha tenido la oportunidad de constatar en Grecia un importante movimiento de regreso a la tierra a raíz de la crisis económica. En Paranesti, al norte de Grecia, se celebra el encuentro internacional del movimiento PELITI para el intercambio de semillas. A la reunión, donde se dan cita unos cincuenta agricultores, acuden más de diez mil personas de toda Grecia con la intención de adquirir semillas de tomate, perejil, judía, trigo y albahaca que se ofrecen gratuitamente.

Pregunta: Panagyotis Saïnatoudi, es usted fundador de este grupo, red o festival PELITI, como se prefiera, y cuyo significado es “viejo roble” en griego clásico, ¿podría hablarnos de usted y de su trayectoria? ¿cómo
comenzó a interesarse por las semillas y por qué decidió en un momento hacer acopio de ellas?

Respuesta: Comencé a hacer acopio de semillas en 1981 cuando recibí un envío de semillas de maíz de los indios de Costa Rica, los cuales ya habían desaparecido entonces, pero las semillas de su variedad de maíz existían aún. Luego, en 1982, tras una excursión con mi hermano encontramos semillas de maíz morado y preguntamos a la propietaria la razón de querer conservarlo y respondió que lo guardaba para sus hijos. Le pedimos algunas semillas y accedió gustosa a dárnoslas. Después recorrí mi pueblo preguntando a los agricultores si podrían darme semillas y la experiencia me permitió ver mi pueblo bajo un prisma diferente, porque las semillas están unidas al hombre, a la comida, a la política y a todas nuestras acciones. Cuando tres años después, en 1985, comencé el proyecto de PELITI como una iniciativa totalmente personal no tenía trabajo y no tenía dinero. Empecé entonces a recorrer Grecia a pie y en autostop para conocer a gente que pudiese proporcionarme semillas. Entre los años 1985 y 2000 conseguí recuperar más de mil doscientas variedades distintas de legumbres a lo largo de toda Grecia.

P: ¿Cuál era la situación de la agricultura en aquel momento? ¿Había muchas semillas de variedades antiguas, y conocimientos agrícolas tradicionales, o acaso empezaban ya a desaparecer?

R: Una de las grandes ventajas de Grecia es que estas variedades tradicionales, aunque menos que otras, se empleaban entonces un poco en todas partes, tanto en Atenas como en las montañas o en las islas, lo que me permitió recuperarlas. Yo siempre creí que las variedades antiguas existían aún, de tal forma que cuando se temía que tal o tal variedad se hubiera extinguido, yo preguntaba a la gente y siempre conseguía dar con ellas.
En una ocasión, después de haber recogido tomates en un huerto, el alcalde me dijo que buscaba una variedad de tomate concreta y yo le respondí que la tenía él mismo en su propio pueblo, sólo que él no la había encontrado porque la consideraba ya perdida, mientras que yo estaba convencido de que existían y eso me permitió encontrarlas. Las personas orgullosas de las semillas que siembran, las conservan; mientras que
quienes las ven solamente como un mero producto comercial no se identifican con ellas y las tiran.

P: Entonces, tras años de acopio, usted comenzó a compartir las semillas que había almacenado, ¿no es así?

R: Después de cada viaje yo regalaba la mitad de las semillas que había conseguido porque me era difícil guardarlas sólo para mí. En 1999, perdimos gran cantidad de semillas en una habitación que resultó inundada y que luego sufrió la voracidad de los ratones. Fue entonces cuando decidí contactar con amigos agricultores para proponerles que fuesen ellos quienes las cultivasen.

P: Pero ¿las siembra usted también o solamente las conserva?

R: Entre 1985 y 2000 no hice más que viajar, y cada vez que regresaba apenas tenía tiempo para quitarme la mochila, descansar un poco y volver a echármela al hombro para ponerme en camino de nuevo, tanto a pie como en autostop. Así que no tenía tiempo de cultivar nada. En 1999 organizamos el primer encuentro de agricultores al que acudieron cuarenta personas, a quienes les dimos las semillas. En 2000, pese a la invitación a este intercambio gratuito de semillas, no vino nadie. Esto me hizo darme cuenta de en qué me había equivocado, lo que se me llevó a organizar el encuentro de otra manera, tal y como se celebra hoy en día.

P: De todos modos, hay algo que no ha cambiado, Panagyotis Saïnatoudi: estos tres días de festival siguen siendo completamente gratuitos. Usted da alojamiento y comida a las siete mil personas que acuden al festival, y usted insiste especialmente sobre este aspecto. ¿Cómo lo consigue?

R: Este año hemos recolectado una tonelada y media de alimentos que los campesinos generosamente nos han ofrecido para que podamos cubrir la alimentación tanto del personal voluntario como de los invitados al encuentro. Cuando yo no tenía ingresos de ningún tipo y viajaba, nunca me faltó nada porque, cuando yo decía que no tenía nada, la gente siempre me daba lo que necesitaba. Y este año, por ejemplo, para la fiesta
he llamado a algunos amigos agricultores para que nos dieran algunos de sus productos y nos han traído un camión entero lleno de lechugas. Si hubiese habido que pagar el trabajo requerido y la comida habríamos necesitado, al menos, 10.000 €. Y nosotros hemos gastado tan solo 100. Mi ropa, el micro que utilizo ahora mismo, el coche que conduzco, la carne que hemos comido; todas esto parecía disparatado o imposible de conseguir y sin embargo, se ha conseguido. Por tanto, todo lo que hacemos hoy, si diariamente trabajamos
con convicción, llegará. Nosotros creamos cada día, con utensilios, la agricultura y el mundo de mañana. Si compramos los limones que viene de Argentina, no ayudamos a los productores de limones de nuestro país. Y vemos a la gente que va a las ciudades a solicitar ayudas sociales porque ya no pueden cultivar los campos que tenían. Esto no solamente hace que no se sientan orgullosos de su agricultura, sino que contribuye al
despoblamiento del mundo rural.

P: Hoy las semillas que se van a distribuir ¿se van a distribuir, a sembrar, a intercambiar, a dar, a multiplicar?

R: Las semillas que se han regalado hoy van a sembrarse, sin duda. Habrá, por supuesto, una parte también
que no se sembrará o que se perderá. Pero, ciertamente, con la siembra y la cultura la gente obtendrá nuevas
semillas.
_______________________________________________________________________________________
HÉLÈNE THEODORAKIS (ISLA CEOS)

P: Hélène Theodorakis, ¿ha venido usted a buscar semillas a PELITI?

R: Sí, cultivo desde hace cuatro o cinco años en una isla del mar Egeo, concretamente en una de las islas Cícladas llamada Ceos. Desde hace años busco semillas “verdaderas”…

P: ¿”verdaderas”?

R: Sí, sí, verdaderas; es decir, semillas tradicionales que se reproducen solas, que son sanas y que tienen sabor. Como apenas he encontrado semillas en mi región, y puesto que la mayoría de la gente compra semillas o plantas ya germinadas, yo he tenido que venir hasta aquí, al norte de Grecia para encontrar semillas de verdad. Ya vine una vez el año pasado y de las semillas que conseguí, algunas se perdieron o no pude conservarlas, ahora he venido a buscar otras que no encontré el año pasado.

P: ¿Por ejemplo?

R: Pepino fue una de las que no conseguí encontrar y sí he encontrado este año. También he encontrado algunas especies invernales como puerros, aunque no ha habido suerte con el brócoli, la coliflor, etc. Hay muchas dificultades.

P: Y en la isla donde usted vive ¿sigue habiendo agricultura?

R: Muy poco, muy poco. Hasta hace diez o quince años había sobre todo ganaderos y también agricultores.

Hoy se pueden contar con los dedos de una mano.

P: ¿Y dice que los agricultores no han conservado las semillas? ¿esto ya no se hace?

R: Hay una o dos personas en toda la isla que han conservado tres tipos de semilla: tomates pequeños típicos de la isla, muy resistente a las plagas y que apenas necesita agua –con una vez a la semana que se riegue es suficiente–; un tipo de berenjena pequeña con la que en otro tiempo solían prepararse tartas.

P: ¿Tartas?

R: Sí, tartas… Y, bueno, finalmente un tipo de melón local. Esto es todo lo que he podido encontrar porque a la gente de la isla le cuesta mucho trabajo guardar sus semillas. Había un campesino que cultivaba melones hasta el año pasado, pero ha tenido un accidente y ya no tiene. Así que he hecho lo posible para exportar fuera de la isla estas tres variedades de semilla para que puedan ser conservadas y no desaparezcan.

P: Uno tiene la sensación por lo que cuenta que muchas de estas especies están al borde de la extinción.

R: Sí. Aunque por otro lado hay mucha gente que acude de Atenas u otras regiones para poder llevárselas y cultivarlas en sus terrenos.

P: ¿desde hace mucho?

R: No, sólo los dos últimos años. La verdad es que este año ha venido bastante gente, así que en el terreno cercano a mi huerto, que estaba vacío hace cinco años cuando yo comencé con la preparación del mío, ahora hay cuatro o cinco personas que se han instalado, justo junto a mí, y han revitalizado la zona.

P: ¿Gente que no sabía nada de agricultura?

R: De los cinco sólo uno era agricultor, y como él no podía ocuparse de todo su terreno alquiló una parte. Y los otros… hmmm, no, ninguno es agricultor. O bien contactan con gente que entiende de agricultura y los contratan por poco dinero, o bien se ocupan ellos mismos y procuran utilizar todos los medios a su alcance: sus conocimientos, los conocimientos de los vecinos, los de los albaneses de la zona que tienen quizás un
poco más de experiencia y buena fuerza física… Pero es cierto, hay mucha gente que quiere hacerlo, pero que ya no sabe hacerlo. Hay un intervalo, por tanto, de una a dos generaciones que se ha distanciado de la tierra y que ya no sabe.

P: ¿Ha buscado en las islas de alrededor?

R: No mucho. Sé que en Naxos hay bastante movimiento. Naxos es una isla grande, aunque está relativamente lejos de nosotros. La particularidad de mi isla es que está algo apartada de las demás.

P: ¿Y en barco?

R: No. El barco que hay ahora es muy reciente, y aun así si lo tomas para ir a algún sitio no hay barco de vuelta hasta una semana más tarde. Así que no hay verdadera comunicación por barco. Hay otras islas más grandes, con más agricultores… porque mi isla era principalmente una isla de ganaderos. Había dos regiones fértiles y ricas: en una de ellas, muy hermosa, han comenzado a edificar porque las autoridades permitieron la construcción en terrenos fértiles y no en otra zona de la isla más en pendiente.

P: ¡El mundo al revés!

R: Exactamente. Y esto ocurre desde hace unos veinte años.

P: ¿Y cuál es la razón que le llevó a empezar a cultivar?

R: Necesitaba sentir el contacto con la tierra. Desde el 2007, cuando se produjeron los incendios en Grecia…

P: ¿En el Peloponeso?

R: En el Peloponeso y en toda Grecia. Es algo que me impresionó enormemente. Y mi jubilación ha sido este terreno. Un terreno que había sido abandonado hacía muchos años porque cultivarlo resultaba un trabajo muy costoso en cuanto a mano de obra. Así que me armé de un grupo de voluntarios que me ayudaron a desbrozar el terreno, y poco a poco he ido invirtiendo más medios, de manera que cada año cultivo un poco más, un trozo de tierra cada vez mayor, y planto árboles, mantengo cultivos de temporada.

P: ¿Y le gusta?

R: Sí, creo que es el único lugar donde me siento yo misma. Es verdad.
_______________________________________________________________________________________

ARIS PAVLOS (Isla Egina)

P: Aris Pavlos, usted se ocupa del movimiento PELITI en la isla de Egina donde se recogen, conservan y siembran semillas.

R: Esto se hace aquí en Egina al igual que también en otras muchas muchas ciudades griegas, de manera similar al trabajo de PELITI, pero a menor escala. Desde hace siete años se organizan eventos de este tipo en Egina, aunque el principal es el festival donde se distribuyen plantas. Lo que nos interesa es que la gente que venga a buscar plantas esté sensibilizada. Nosotros no ofrecemos semillas, sino semillas ya plantadas en tiestos; porque aunque alguien venga a uno de nuestros eventos y se lleve varias bolsas de semillas no es
seguro que vaya a plantarlas, y éstas pueden acabar guardadas para siempre en un cajón. Igualmente también hay gente que viene y se lleva plantas, sólo porque son gratis, sin saber de qué se trata exactamente. Incluso si explicamos qué es PELITI y porqué hacemos esto, mucha gente nos escucha pero no se acuerda después. Así que hemos pensado en reunirnos y hacer una pequeña fiesta cuando sembramos y las plantas germinan.
Nosotros regalamos plantas en pequeños tiestos, incluso a los que vienen por primera vez.
La mayoría de la gente ignora hasta qué punto es fácil poner una semilla en un tiesto para que crezca y se convierta en una planta, sobre todo si están acostumbrados a comprarlas ya germinadas en las floristerías. Ahora bien, en este encuentro la gente aprende a hacerlo por sí misma, a utilizar sus propias manos y a responsabilizarse de las semillas, que son pequeñas y frágiles, para plantarlas de forma apropiada. La gente se lleva los tiestos que les ofrecemos para cuidar de las plantas en sus casas y las traen a nuestro encuentro un mes y medio o dos meses después para distribuir las plantas ya germinadas. Al principio la
gente quería llevarse cinco tiestos de cada variedad para tener todas las variedades porque tenían más bien la intención de conservarlas que de distribuirlas llegado el momento de la distribución. Por esto habíamos pensado que sería mejor dar a la gente sólo una o dos variedades de semillas para que se quedasen con unas pocas, como habían estado haciendo hasta entonces, pero para que distribuyesen también en el siguiente encuentro de PELITI. La mayoría siente una gran responsabilidad por estas semillas, especialmente si no se
sienten seguros de hacer que germinen con lo que acaban por regarlas demasiado y, con ello, por matar a la planta. Es como con nuestros hijos: los queremos mucho, pero no es el exceso de amor lo garantiza que los eduquemos bien. Y así, la gente que vive y adquiere esta experiencia se sensibiliza para hacer germinar la simiente, conservarla y perpetuarla. Nuestra isla, Egina, está muy cerca de Atenas y mucha gente de la capital para tomar parte en el encuentro, conseguir semillas y aportar plantas ellos mismos.

P: ¿Pero les explican ustedes cómo debe hacerse?

R: Siempre les explicamos, y también los productores. Aunque vemos que muy a menudo la gente tiende a coger la planta sin escuchar demasiado los consejos. Por ejemplo, este año, en la fiesta en la cual distribuimos las semillas, una pareja de atenienses se hicieron con trescientos tiestos. Nosotros les explicamos que no es fácil ocuparse de tantas plantas en Atenas, pero ellos insistieron. No nos equivocábamos cuando pensábamos que no volverían con demasiadas plantas en el siguiente encuentro. Y efectivamente, volvieron con unas diez aproximadamente. Aun así les dejamos que se las llevasen. La responsabilidad de implicarse por el cuidado de las semillas recae en cada uno de nosotros, individualmente.
Nadie debe imponerla. Salvar la simiente tradicional no es responsabilidad de una sola persona o de un grupo, sino de todos en conjunto, incluso si para algunos se trata de la primera vez que participan. Yo trabajo como profesor de educación física en educación primaria y en nuestra escuela hemos organizado este año una pequeña fiesta en la que hemos plantado mil plantas. Siempre nos ha gustado leer los artículos y escuchar los programas sobre otros proyectos; hoy nos toca a nosotros alegrarnos del trabajo que hemos realizado.
_______________________________________________________________________________________

ANTONIS DIAMANTIDIS, PERMACULTOR
P: Antonis Diamantidis, ¿ha sido usted siempre granjero?

R: No, yo nací en Tesalónica, la segunda ciudad más grande de Grecia. Luego pasé once años en elextranjero, concretamente en Latinoamérica, donde estudié, y más tarde trabajé en Indonesia para el “World Rainforest Mouvement”. Volví hace tres años a Grecia en una decisión personal ideológica y política. A partir de mi experiencia, el volver y trabajar la tierra con otras personas aquí, en Grecia, se convirtió en algo que caía por su propio peso, y para mí era preferible esto a trabajar a nivel internacional. Trabajar en esta sociedad y en esta tierra es lo más importante.

P: Así pues, decidió instalarse aquí como campesino.

R: Sí. Ser campesino es una cosa; ahora bien, yo trabajo en realidad utilizandO determinadas técnicas que tienen el fin de crear el humus y regenerar así el suelo. En este sentido, cultivar no pretende sino crear una tierra fértil de la que luego extraeremos nuestra cosecha.

P: ¿De qué técnica se trata?

R: Permacultura y agroecología, en una línea similar a la agricultura natural según los principios del japonés Fukuoka.

P: ¿Y le da para vivir?

R: Aún no, en todo caso todavía no completamente. Es decir, por el momento estoy en un proceso donde invierto más de lo que obtengo, aunque el mes que viene vamos a comenzar un proyecto de AMAP1 (en francés – Asociación para el Mantenimiento de una Agricultura Campesina) cerca de Corinto, donde yo vivo actualmente, donde vamos a reagrupar unas cincuenta familias de Atenas. Esta iniciativa, en colaboración con un granjero de la región, va a permitirnos ofrecer una variedad de semillas mayor que la que cultivábamos al principio. Esto cubrirá las necesidades de estos hogares y familias.

P: ¿Por qué ha decidido embarcarse en este proyecto de AMAP?

R: Bueno, en primer lugar, yo he trabajado durante años como investigador, exactamente en la gestión forestal y ahora me apetece trabajar la tierra y, con ello, ganar para vivir. Por otro lado, se trata también de despertar las conciencias, de producir un cambio de sensibilidad en la población, lo que es un verdadero reto para nosotros actualmente en Grecia. No olvide que hasta hace poco toda nuestra dependía se basaba en la explotación de pequeñas propiedades agrícolas y en un plazo de unos cincuenta años todo ese saber ha desaparecido por completo. Por tanto, en este contexto queremos hacer ver que es posible llevar una vida digna y autosuficiente explotando la tierra y proporcionando alimentos de calidad y, de esta manera, reforzar tanto las relaciones sociales como los lazos que unen el hombre a la tierra.

P: Entonces, ¿no se trata, pues, de una decisión condicionada por la crisis?

R: No, en absoluto. Yo comencé… Bueno, es una idea que yo tenía antes de la crisis, aunque la crisis ha acentuado la urgencia de este proceso y de todo lo que está ocurriendo ahora mismo en Grecia. Además, esta crisis es como una oportunidad que no existía hace tres años. Este movimiento no habría podido desarrollarse 1 Association pour le Maintien d’une Agriculture Paysanne (AMAP) de manera tan generalizada como lo ha hecho.

P: ¿De qué manera?

R: Pues hasta 2007 o 2008, Grecia vivía es una especie de burbuja relacionada con la financiación fuera de la agricultura, así como con la financiación de los poderes públicos y numerosas instituciones. Y luego, además, el salario mínimo rondaba los 750€, relativamente alto. En un contexto tal, la gente podía vivir medianamente bien residiendo en la ciudad y… si se quiere, el éxodo rural hacia el medio urbano era un proceso que seguía en pleno desarrollo en ese momento. Desde entonces, el salario mínimo se ha reducido a
unos 400€, en parte por la actuación del FMI y las obligaciones impuestas por las agencias financieras que nos vemos forzados a tener que respetar. Así que ante esta situación la gente busca soluciones y es consciente de que deben cambiar su modo de vida, su forma de consumir, sus necesidades, y ven el futuro de otra manera: las perspectivas del porvenir son ahora distintas.

P: ¿Puede usted, entonces, proponer una alimentación de calidad a un precio mejor del que existe en los mercados tradicionales?

R: Sí, desde luego. Hay dos razones para ello: desde el punto de vista del precio en valor absoluto, éste es el mismo que en otros lugares; y a ese nivel la producción local representará algo mucho más sostenible y abordable desde el punto de vista económico. Y el segundo aspecto es que la gente pronto comprenderá las consecuencias de nuestro modo de vida actual, y de la forma de producir y consumir que tenemos. Se darán cuenta que el valor relativo del precio en euros cambia. Es en esta situación cuando la gente toma una
decisión, aunque sin duda seguirá habiendo gente que compre productos importados o incluso producidos en países del tercer mundo. Pero esta decisión será una decisión consciente en la sociedad, ¿no es así? Porque tenemos el derecho a tomar decisiones y yo no soy quién para imponer lo que pienso a medida que la gente
comprenda cómo se producen los alimentos, por qué etapas pasan los productos hasta llegar al plato, entonces será cuando la verdad se hará evidente. Entonces el consumo será local con un transporte mínimo de los productos y una relación estrecha con los productores locales. Si nos hacemos cargo de la comercialización y distribución de los productos a nivel local, la producción local será en ese momento competitiva –en todo caso en relación al precio de mercado.

P: ¿Cómo ve usted entonces la crisis, como una oportunidad para el cambio o como algo temible?

R: Me gustaría mencionar algo en lo que PELITI ha insistido desde hace muchos años y que nos ha inspirado enormemente: cuando la situación es sombría –no tanto triste–, podemos, perfectamente, encender la luz. Ahora, la crisis económica en Grecia no ha ocurrido más que porque ya había una crisis social profunda. Tenemos que afrontar el reto de asumir nuestra parte de responsabilidad, de aprovechar esta oportunidad que es sobre todo un regalo, en realidad, que nos permite responsabilizarnos tomar decisiones sobre cómo vivir, cómo consumir, cómo actuar y porqué.

P: Pero ¿son ustedes una minoría? ¿Son los únicos que piensan de esta manera? O por el contrario, ¿piensa usted que se trata de un movimiento amplio que engloba un gran número de personas?

R: No, hay muchísima gente involucrada en este movimiento. De hecho este movimiento se desarrolla a una velocidad increíble. Durante estos últimos meses, un socio y yo, hemos surcado Grecia y hemos encontrado a mucha gente de todos los rincones del país involucrados en proyectos de moneda complementaria, de trabajo cooperativo en las explotaciones agrícolas, de intercambio de bienes y servicios sin contrapartida monetaria.
Nos ha impresionado ver que un tal número de gente se mueve en esta dirección. Porque este movimiento, de manera más general, un movimiento social en Grecia, no ha sido tan relevante como en Europa occidental porque la comunicación no siempre ha sido buena entre los grupos, pero en el seno de cada grupo tienen lugar acciones extraordinarias.

P: ¿Por ejemplo?

R: Por ejemplo, unos amigos en Karditsa suelen organizar una fiesta de la tierra que debe de ir ya por la octava o novena edición y que reúne a unas cien personas. Tiene también una red de moneda complementaria. Trabajan conjuntamente en sus explotaciones agrícolas y se ayudan mutuamente sin contrapartida monetaria. Han puesto en marcha, además, un huerto compartido en un espacio ocupado en la municipaliad de Karditsa que lleva funcionando diez años y que es el más antiguo, que yo sepa, que existe
hoy en día en Grecia. Se ocupan de la conservación e intercambio de semillas o de la recuperación de técnicas artesanales que se transmiten hoy a las nuevas generaciones para que las conozcan.
______________________________________________________________________________________

ROXANE MITRALIAS

P: Roxane Mitralias, es usted griega; ahora vive en Francia, donde trabaja con los agricultores, lo que no le impide, por otro lado, volver regularmente a Grecia como es el caso en este momento; y se interesa por la situación actual que vive el país. Ha podido observar que hay conexiones entre la crisis actual y un cierto número de respuestas, de iniciativas que existen ya desde hace un tiempo. Algunas de ellas parecían alternativas o radicales, pero hoy se encuentran en el seno de la crisis. ¿Podría contarnos un poco qué ha
visto usted?

R: La crisis ahora mismo en Grecia es una crisis muy profunda. Tiene muchos elementos: por supuesto uno de ellos es el económico y social, pero respecto a su pregunta creo que conviene subrayar el aspecto sanitario y alimentario…

P: ¿Es decir?

R: Por ejemplo, la destrucción de la seguridad social está llevando a un tercio de la población a encontrarse fuera de la protección social, lo que da lugar a experiencias alternativas autogestionadas al margen del mercado, es decir, centros de salud autogestionados con personal médico voluntario que se ocupa de la gente sin cobertura sanitaria.

P: Bueno, eso puede funcionar durante un tiempo, pero ¿cómo se mantiene el sistema médico, cómo se remunera este servicio y cómo se reabastecen de material sanitario, puesto que en algún momento es necesaria la circulación de dinero?

R: Se basa fundamentalmente en un servicio de voluntariado y muy poca gente recibe una remuneración ahora mismo en Grecia, pero es cierto que la cuestión de si es viable a largo plazo está aún en el aire. Ahí tenemos el caso de un hospital autogestionado durante un cierto tiempo, donde se ha visto rápidamente que las fuerzas represivas se entrometen y no permiten que estas experiencias de autogestión sigan adelante. Por lo tanto no sabemos si éstas podrían desarrollarse a largo plazo y ser viables, ni tampoco si podrían en algún
momento incorporar algún tipo de remuneración.

P: Y desde el punto de vista alimentario, decía usted que se trata del otro gran problema…

R: Ahora mismo hay que comprender que en una situación donde el salario desciende y los impuestos aumentan enormemente, los precios son elevadísimos. Atenas es más cara que Berlín. Es muy, muy cara. Cualquier francés que fuese a Grecia se llevaría una sorpresa al ver los precios en los supermercados, lo que no deja de ser chocante para un país con una producción agrícola significativa. Además, en los supermercados donde se compra, la mayor parte de productos a disposición del consumidor provienen del extranjero. Por ejemplo, se consumen naranjas españolas en lugar de naranjas griegas, concretamente en el Peloponeso, que es una región productora de naranjas, y donde ha dejado de haber recolecta porque el coste de la mano de obra supera el precio de venta. Ya no es rentable para los productores. Hasta ese punto hemos llegado…

P: ¿Y esto no cambia con la crisis?

R: Sí, el famoso “movimiento de patatas” ha comenzado a ofrecer soluciones en este sentido. Como decía hace un momento estamos en una situación donde los precios son muy altos y la crisis alimentaria se está agudizando. Hay quien dice que nos enfrentamos a una hambruna en otoño, en parte como consecuencia de las nuevas medidas que prepara el gobierno. Así que este movimiento ha empezado a vender directamente al consumidor, algo que ya conocemos en Francia. La idea consistió en tomar las patatas que se estaban echando a perder en los almacenes de los productores de Nevrokopi, en el norte de Grecia, no muy lejos de aquí, y redistribuirlas a los consumidores griegos a un tercio del precio de venta en los supermercados. Al principio no había remuneración para los productores, pero poco a poco, a medida que el sistema ha tomado forma, éstos han pasado a ganar entre 25 y 30 céntimos por kilo de patatas, mientras que antes los comerciantes e intermediarios les cobraban entre 10 y 15 céntimos. Ahora los consumidores consiguen patatas a un precio de unos 30 céntimos dependiendo del lugar donde se encuentren, cuando antes las compraban en el supermercado a 80 o 90 céntimos el kilo. El movimiento se ha extendido, por tanto, a otras producciones: frutos secos, fruta, legumbres, verduras…

P: ¿Y se recogen hoy las famosas naranjas del Peloponeso?

R: Sí, y una noticia aun mejor es que entre los campesinos están surgiendo cooperativas alternativas, sabiendo que las cooperativas en Grecia tienen bastante mala reputación en el sentido de que no trabajan a favor de los productores, sino en su propio beneficio; así que estas cooperativas alimentarias de campesinos, especialmente en el Peloponeso crean redes de productores y envian la producción a las grandes ciudades. Por tanto, el “movimiento de patatas” se ha extendido a otros productos a partir del trabajo de grupos de voluntarios, sobre todo de consumidores, y ha sido posteriormente adoptado por los ayuntamientos, concretamente en las grandes ciudades como Atenas, de forma que hoy son los ayuntamientos quienes organizan el suministro, y los habitantes hacen sus pedidos ya sea a través de la web o por teléfono.

P: ¿Entonces no se trata exactamente de proyectos AMAP?

R: No, y la verdad es que quizás este modelo no esté adaptado totalmente a la situación griega. Habría que elaborar, reflexionar e innovar en este aspecto de la venta directa. Una de las principales peticiones de los productores, sobre todo de productores ecológicos, es volver a crear un mercado de productores, puesto que tienen muchísimas dificultades para conseguir un puesto en los mercadillos habituales al aire libre. Quizá sea
porque el puesto cueste demasiado, o porque haya tensiones entre comerciantes… no lo sé, el caso es que no funciona. En cualquier caso ellos querrían conseguir una ley que permitiese la existencia de mercados únicamente de productores y que protegiese, de hecho, su condición de productores.

P: ¿Y las iniciativas que proliferan lo hacen únicamente en torno a la salud y la alimentación, o bien hay otros ámbitos, Roxane Mitralias?

R: La autogestión tiene lugar en todos los ámbitos con el fin de sobrevivir. El precio de la gasolina, por ejemplo, ha aumentado enormemente: el litro cuesta hoy unos 2€ cuando hace un año costaba un 1€ o menos, aquí en un país donde los transportes públicos están deliberadamente infradesarrollados. Por tanto surgen proyectos, algunos novedosos en Grecia como el de compartir coche en el medio rural. También se emplean sistemas de trueque, donde hay gente que necesita cambiar de ropa, por ejemplo, o renovar los
electrodomésticos. Y finalmente también hay bancos de tiempo que ofrecen intercambio de servicios, del tipo yo te enseño a hacer esto y tú me enseñas esto otro… con lo que se produce un intercambio de conocimientos en el que la gente aprende a hacer pan, a cocinar, etc. En definitiva, se trata de una sociedad civil que revive, y la solidaridad que se crea es el aspecto más positivo. En cuanto a la cuestión de cómo abordar temas más complejos como el de involucrar a aquellos que no tienen acceso a estos recursos, alimentar a las ciudades, qué hacer con los monocultivos, cómo volver a una tierra más diversificada… estas son cuestiones a las que aún hay que responder. Pero sobre todo lo más importante es que la formación en agricultura vive hoy una demanda enorme, especialmente formación en
una agricultura autónoma y por tanto agroecológica; hay un verdadero problema de formación y de asesoramiento porque el estado ejerce presión mediante consultorías para poner en marcha proyectos absurdos con el fin de exportar: podemos citar la energía fotovoltaica, el cultivo de arándanos, los champiñones, los caracoles; sobre todo para el mercado francés, porque el mercado francés está completamente saturado. En este sentido, al cabo de unos años los precios pegan una bajada y el agricultor
deja de tener ingresos suficientes, con lo que lo fundamental es proponer una política de soberanía alimentaria para Grecia, formar a todos los agricultores que comienzan y que no tienen el conocimiento de la tierra y de los animales y salir de la OMC, puesto que nada de esto es posible si no es fuera de la OMC.
Enlace a la asociación PELITI: http://www.peliti.gr/pages_eng/peliti_eng_.htm
Entrevistas: Ruth Stégassy
Traducciones al francés: Julien Lassauque et Hélène Joguet Lecointre
Traducción al español: Miguel Jiménez-Bravo (Eje de Transición) miguel.jimenez.bravo@gmail.com

Enlace para escuchar la versión original en francés: http://www.franceculture.fr/emission-terre-a-terre-grece-1-retour-a-la-terre-2012-06-09

Biomímesis como equivalente de sostenibilidad

30 May
por Transición Sostenible, en la categoría Artículos, Blog   |  Sin comentarios

Hace unos dias llegó a nuestras manos un trabajo bien documentado y de lo mas interesante titulado: «Biomímesis como equivalente de sostenibilidad. Las Sociedades de emergencia energética como muestra.» Se trata de un documento de investigación realizado por Vanesa Calero como tesina del master en Globalización y Desarollo en Hegoa/UPV-EHU. En él, Vanesa analiza lo que denomina «las sociedades en emergencia energética» y las acciones que estan llevando a cabo. Y para ello toma como ejemplos a tres de las iniciativas de transición existentes en el territorio del estado español. Sin mas os dejo con él.

A continuación podreis leer la introducción de dicho trabajo y al final podeis ver un enlace en el que descargar el documento (134pag.). Gracias Vanesa.

INTRODUCCIÓN

Tema de estudio y objetivos a lograr

El objetivo final de este trabajo es el estudio de las sociedades en emergencia energética, en concreto, analizar qué camino están siguiendo las mismas, teniendo siempre de referente los principios de sostenibilidad, para comprobar que sus acciones son factibles y realmente transformadoras. Entendiendo como transformadoras todas aquellas acciones encaminadas hacia la búsqueda de la sostenibilidad, que comentaremos en detalle en el segundo capítulo de este trabajo.

Para lograr este objetivo voy a analizar el caso concreto de tres iniciativas en transición que se están dando en el estado Español. Para hacer más rico el análisis y la comparación entre diferentes iniciativas se ha escogido el caso de una ciudad, Barcelona, el de una isla, Ibiza, y el de una universidad, la Universidad de Santiago de Compostela. En cuanto a las dos primeras presento un resumen de la situación en la que se encuentran, teniendo en cuenta siempre los principios de sostenibilidad, aunque no sigo las premisas de planificación estratégica al no tener todavía planes estratégicos definidos pues por el momento se encuentran en fases previas. En el caso de la tercera iniciativa que presento, la USC en transición, si analizo las premisas de planificación estratégica, pues la Universidad en cuestión tiene un Plan de Desarrollo Sostenible definido, plan en el que se enmarca la iniciativa en transición, de ahí que en este caso si se haga el análisis en base a estas premisas.

Justificación del tema escogido

La justificación de por qué he escogido este tema no es otra que la preocupación por la gran crisis sistémica en la que nos encontramos, crisis que nos va a obligar a realizar enormes transformaciones en nuestra forma de vida actual, además mucho antes de lo que somos conscientes. Es priorizar la situación de urgencia a la que en breve nos vamos a tener que enfrentar. Para lo cual considero que será de utilidad comprender las causas de la situación a la que nos enfrentamos, pero también tener en funcionamiento actuaciones para hacer de esa transición lo menos traumática posible.

Aparte, el tema en sí de la energía me supone gran interés, pues es uno de los sectores que se verá más profundamente afectado por el techo del petróleo, y es también uno de los que mayores cambios ha dado desde la Revolución Industrial, cambios además en la dirección del paradigma dominante, donde los seres humanos nos vemos como la especie superior. Actualmente estoy colaborando con la organización Enginyeria Sense Fronteres de Catalunya en la realización de un proyecto de investigación enfocado al cambio climático y las industrias extractivas. Por lo que mediante la realización de esta tesina, en la que me enfoco más en el tema del techo del petróleo y en las posibles vías para la transformación que nos espera, complementado con esa investigación, me está sirviendo como un primer punto de contacto con este tema de enorme aprendizaje. Finalmente, a través de este trabajo también he intentado expresar mi forma personal de entender las cosas, una visión sistémica en la que la naturaleza es el gran ecosistema que engloba el resto de cosas.

Los tres casos de estudio han sido escogidos por diversos motivos, por un lado quería analizar casos cercanos que estén poniendo en práctica la filosofía de la transición. Casos que además, dos de ellos, Barcelona e Ibiza, son los únicos casos del estado Español inscritos como oficiales en la página principal del movimiento Transition Towns. El completarlo con el estudio de una universidad en transición lo considero de gran interés, pues es de las pocas iniciativas existentes y puede ser un referente a tener en cuenta para otras universidades. De esta forma analizo casos concretos y cercanos, iniciativas reales que tenemos al lado de las que poder aprender otra forma de funcionar.

Estructura de la tesina

Aunque el tema de estudio de este trabajo sean las SEE, para enmarcar estas iniciativas en un marco teórico y de situación, se analiza primero la situación actual en la que nos encontramos, así como el marco teórico del camino hacia la sostenibilidad que nos muestra la naturaleza. Por eso, para la realización de este trabajo se ha seguido la siguiente línea argumental, y así mismo estructural, a lo largo del trabajo. En el primer capítulo se hace un análisis de la situación actual en la que nos encontramos en cuanto a recursos naturales, principalmente petróleo y cambio climático, al ser estos dos las causas por las que surgen las sociedades en emergencia energética, objeto del trabajo. En este capítulo se muestra la gran crisis sistémica en la que nos encontramos, la que invariablemente nos hará pasar por transformaciones en la forma de vida actual de las sociedades, pero que además serán transformaciones que provocarán cambios en muchos de los aspectos más arraigados de nuestra civilización, esto es, en aspectos del paradigma dominante, pensamiento cuyas líneas principales presentamos en el siguiente capítulo.

Por eso, en el segundo capítulo, aparte de esas líneas generales del paradigma dominante que comentábamos, se presenta el marco teórico en el que basarse para realizar estas transformaciones, inminentes y necesarias, bajo el prisma de la sostenibilidad, que no puede ser otro que el de la biomímesis, del que se derivan los principios de sostenibilidad de los ecosistemas. Para presentar esta visión de la sostenibilidad se expone primero toda la línea de pensamiento que deriva en ella, como es la teoría general de sistemas y la economía ecológica, de las que se presentan aspectos básicos, como qué se busca, sus orígenes, etc.

Pasamos ya al tercer capítulo y así al objeto de nuestro estudio, las sociedades en emergencia energética. En este tema se presenta qué son las sociedades en emergencia energética, cómo surgieron y por qué, y se ahonda en detalle en los dos movimientos principales de estas sociedades, las Post Carbon Cities y las Transition Towns. Sobre estas dos últimas se presenta un análisis en detalle de lo que significa el movimiento, sus orígenes, qué buscan, qué hay que hacer para convertirse en una PCC o en una TT, y sobre todo, qué están haciendo por el momento, presentando para esto también cada uno de los casos que han servido de referencia para cada movimiento respectivamente. El caso de la ciudad de Portland (Oregón, EEUU) para el primero, y el de la ciudad de Totnes (Devon, RU) para el segundo.

Con esto pasaríamos ya al último capítulo en el que se analizan las premisas de planificación estratégica para centrarnos en la planificación estratégica de la sostenibilidad en las SEE, haciendo un breve resumen de la situación de los casos de Portland y Totnes de nuevo, para darle coherencia a la pequeña muestra que se hace de estas dos iniciativas en el capítulo anterior. De esta forma pasamos ya a centrarnos en los tres casos de estudio que hemos comentado anteriormente, englobados los tres dentro del movimiento de las TT o, más comúnmente llamadas, Iniciativas en Transición, pues ya se ve que no todo son ciudades.

Metodología empleada

La metodología empleada para la realización de esta tesina ha sido básicamente a través de métodos indirectos, esto es, búsqueda de bibliografía y su posterior análisis. Los autores en los que me he basado han sido, principalmente Roberto Bermejo, el cual plantea en su último libro los temas que analizo en esta tesina y en el que me he basado como referencia; pero para completar esta visión, en cada tema he considerado algunos de los autores y organizaciones clave para cada temática en cuestión. De esta forma, para el primer capítulo he utilizado trabajos de M. Marzo o N. Stern, y me he basado principalmente en las páginas de ASPO, Crisis Energética y The Oil Drum. Para el segundo capítulo, en el punto de economía ecológica he utilizado trabajos de J. Martínez Alier o J. Naredo, entre otros; para la teoría de sistemas me he basado en L. Bertalanffy, precursor de la misma; y para el tema de la biomímesis y de los principios de sostenibilidad he querido ahondar, en la medida de lo posible, en la ecología, citando a autores como R. Margalef. Por último, para los dos últimos capítulos sobre SEE, me he basado en textos de R. Hopkins y B. Brangwyn para las TT, y de D. Lerch para las PCC, así como el Monográfico sobre SEE de la Revista The Ecologist de este mismo año. Del mismo modo, también me he basado en las páginas principales, por un lado de los movimientos de las SEE, esto es la Transition Network para las TT y el Post Carbon Institute para las PCC, y por otro, de las páginas o blogs de los tres casos de estudio.

La biomimesis como equivalente de sostenibilidad. Las sociedades de emergencia energética como muestra. Vanesa Calero

Ecología profunda – Escoger la vida

23 May
por Transición Sostenible, en la categoría Artículos, Blog   |  2 Comentarios

Ecología profunda – Escoger la vida

El siguiente artículo es un fragmento del libro de ecología profunda «Volver a la Vida» de Joanna Macy. Experta en Ecología Profunda y una de las fundadoras de la Ecofilosofía y de la Ecopsicología Joanna Macy ha trabajo durante mas de treinta años ayudando a transformar la desesperación y la apatía frente a la crisis ecológica y social, en una acción constructiva y colaborativa, revelándonos una nueva visión del mundo que nos libera de los prejuicios y actitudes que amenazan la vida sobre la tierra.

Más información sobre Joanna Macy en: www.joannamacy.net

Más información sobre el curso de ecología profunda del «Trabajo que Reconecta» de Joanan Macy que organiza Transición Sostenible los dias 29, 30 de Junio y 1 de Julio del 2012, aquí.

Elegir La Vida

Os he puesto delante la vida y la muerte, la bendición y la maldición; escoge, pues, la
vida, para que vivas tú y tu descendencia
(Deut. 30, 19)

VIVIMOS EN UN TIEMPO EXTRAORDINARIO SOBRE LA FAZ DE LA TIERRA.
Poseemos más desarrollo técnico y conocimiento del que nuestros ancestros pudieron
haber soñado. Nuestros telescopios nos permiten ver a través del tiempo lo comienzos
del universo; nuestros microscopios abren los códigos principales de la vida orgánica;
nuestros satélites revelan patrones climáticos globales y los comportamientos ocultos de
naciones remotas. ¿Quién hubiera imaginado tal abundancia de información y poder,
incluso un siglo atrás?

Al mismo tiempo somos testigos de la destrucción de la vida a una magnitud que
ninguna generación pasada, en base a la historia documentada, se enfrentó. Ciertamente
nuestros ancestros conocieron la guerra, las plagas y la hambruna; civilizaciones
enteras, como la fenicia y la Roma imperial, se hundieron cuando cortaron sus árboles
para fabricar barcos de guerra y convirtieron sus tierras en desiertos. Pero ahora no sólo
es un bosque aquí y unas tierras arables y zonas pesqueras por allá; hoy en día especies
enteras, culturas y ecosistemas a nivel global mueren, incluso el plancton productor de
oxígeno que habita los mares.

Quizá los científicos tratan de comunicarnos lo que está en juego cuando
quemamos las selvas lluviosas y combustibles fósiles, cuando vertemos contaminantes
tóxicos al aire, el suelo y el mar, y cuando usamos químicos que devoran la capa de
ozono protectora de nuestro planeta. Pero sus advertencias son difíciles de escuchar,
pues la nuestra es una Sociedad de Crecimiento Industrial* (SCI) en la que la economía
depende de un consumo interminable de los recursos. Para mantener sus motores de
crecimiento, la Tierra es proveedora y basurero a la vez. El cuerpo del planeta no sólo es
extirpado y transformado en bienes comerciales, sino que también sirve de “coladera”
para los subproductos venenosos de nuestras industrias.** Si sentimos de alguna manera
que el tiempo se acelera, estamos en lo cierto—ya que la lógica de la SCI es
exponencial, demandando no solo “crecimiento,” sino una creciente tasa de crecimiento.
Al igual que Alicia en el tablero de ajedrez de la Reina Loca, debemos correr siempre
más rápido para mantenernos en el mismo lugar. ¿Qué es lo que les espera a nuestros
hijos? ¿Qué quedará para aquellos que están por venir? Estamos demasiado ocupados
para pensar en ello. Tratamos de cerrar nuestras mentes a los escenarios de pesadilla, del
deseo y la guerra en un mundo devastado y contaminado.

Hemos llegado hasta este punto. Hemos sobrevivido muchas dificultades y
evolucionado a través de diversas aventuras en nuestro viaje planetario y aún hay tantas
promesas por desarrollarse—pero es posible perderlo todo. A medida que la intrincada
red de sistemas naturales se deshace, es posible que hundamos todo. Las palabras de
Yahvé a Moisés cobran un significado literal: “He puesto ante vosotros la vida y la
muerte, por lo tanto, escoge la vida.”

La Elección de un Mundo Sostentible
Es posible elegir la vida. A pesar de graves predicciones, todavía podemos actuar para
asegurar un mundo en el que se pueda vivir. Es crucial saber que podemos satisfacer
nuestras necesidades sin destruir nuestro sistema de soporte vital. Existe el su vida, una economía global en continua expansión está destruyendo lentamente a su huésped—el conocimiento técnico y los medios de comunicación para hacerlo. Hay la inteligencia y los recursos para producir suficiente comida, asegurar aire puro y agua limpia y generar la energía requerida utilizando el poder del sol, el viento y la biomasa. Si tenemos la
voluntad, tendremos los medios para controlar la población humana, para desmantelar
armas y evitar guerras y para dar a todos una voz democrática de auto-gestión.***

Elegir la vida significa construir una sociedad que sustenta la vida. “Una
sociedad sustentable es aquella que satisface sus necesidades sin poner en juego las
posibilidades de las generaciones futuras,” de acuerdo a Lester Brown del World Watch
Institute. En contraste con la Sociedad de Crecimiento Industrial, una sociedad que
sustenta la vida opera dentro de la “capacidad de carga” de su sistema de soporte vital a
nivel regional y planetario, tanto en los recursos que consume como en los desechos que
produce.

Elegir la vida en este tiempo planetario es una aventura formidable. Tal como lo
están descubriendo personas de todos países y formas de vida, está aventura requiere de
mayor valentía y solidaridad que cualquier campaña militar. Desde estudiantes de
escuelas preparatorias que regeneran arroyos para que el salmón se reproduzca hasta
vecinos que crean huertas comunales en lotes disponibles de la ciudad, desde activistas
que retrasan la tala de árboles hasta que los estudios de impacto ambiental se han
realizado hasta los ingenieros en energía eólica que llevan su tecnología a regiones con
escasez de energía. Innumerables grupos se organizan, aprenden y actúan.
Puede que ésta actividad humana multifacética en favor de la vida no obtenga
los titulares de los noticieros, pero será lo más valioso para nuestra descendencia.
Pues si habrá un mundo para aquellos que vienen después de nosotros, será por que hemos
llevado a cabo una transición de la Sociedad de Crecimiento Industrial a una sociedad
que sustenta la vida. Cuando la gente del futuro mire este momento histórico, verán
quizás con más claridad de lo que podemos ver ahora, cuan revolucionario es nuestro
tiempo. Tal vez lo denominen el tiempo del Gran Giro.

Ellos, nuestros descendientes, lo verán como algo que marcó una época.
Mientras que la revolución agrícola duró siglos y la revolución industrial tomó
generaciones, está revolución ecológica tiene que ocurrir en cuestión de pocos años.
Tiene también que ser de mayor alcance, involucrando no sólo la economía política,
sino también los hábitos y valores que la promueven.

El Gran Giro
Tomemos prestada la perspectiva de futuras generaciones para contemplar como el
Gran Giro está adquiriendo relevancia hoy en día a través de las decisiones de
innumerables grupos e individuos. Podemos ver lo que está sucediendo en tres áreas o
dimensiones que se refuerzan mutuamente y ocurren simultáneamente. Éstas son: 1)
acciones para disminuir el daño causado a la Tierra y sus seres; 2) análisis y creación de
estructuras alternativas; y 3) un cambio fundamental de cosmovisión y valores. Muchos
de nosotros estamos comprometidos con las tres áreas, ya que cada una es necesaria
para la creación de una civilización sustentable.

* Estamos en deuda con el ecofilósofo Noruego Sigmund Kwaloy por haber acuñado éste término.
** “Justo como un cáncer en continuo crecimiento que eventualmente destruye los sistemas que sostienen ecosistema Terrestre. Lester Brown. State of the World, 1998.
*** John Madslien, The Purchasing Power of Peace, 2009: Se gastan 2.4 trillones de dólares americanos a
nivel mundial en la industria militar, de acuerdo al Índice Global de Paz. En base al Reporte de las Naciones Unidas El Estado del Desarrollo Humano, 1998, se requerirían $15 billones de dólares americanos para proporcionar servicios sanitarios y educación básica para todos en los países del mundo
en vías de desarrollo.

Aquí podéis descargar el libro de ecología profunda «Volver a la Vida» de Joanna Macy.

Movimiento de Transición; de la indignación a la acción

22 May
por Transición Sostenible, en la categoría Artículos, Blog   |  2 Comentarios

Movimiento de Transición: de la indignación a la acción - Transición SostenibleMovimiento de Transición; de la indignación a la acción

Como autoorganizarse para cambiar el paradigma del consumismo en un mundo complejo y finito.

Os propongo un pequeño ejercicio. Levantad la mirada y observad atentamente a vuestro alrededor. ¿Qué veis? ¿Existe alguna relación entre los objetos, personas o cosas que os rodean? ¿Qué relación tenéis con vuestro entorno?

Así es, vivimos en un mundo basado en la interdependencia. Cada uno de los elementos existentes depende de una u otra manera de otros elementos, formando así sistemas de todo tipo y escala, que a su vez se relacionan entre sí. Por ejemplo, no podemos entender la economía si no es dentro de una sociedad, y a su vez no puede existir ninguna sociedad si no es dentro de un medio natural que lo sustenta. Es justamente esta visión sistémica la que nos permite comprender que no somos seres aislados del mundo físico y natural, sino que formamos parte de sistemas socio-ecológicos complejos y dinámicos. En otras palabras, pueblos, ciudades o comunidades, habitadas por personas y otros organismos vivos, que se encuentran en continua evolución y donde abundan las propiedades emergentes, existe un elevado grado de incertidumbre y los cambios pueden ser irreversibles.

Un concepto clave para comprender el funcionamiento de los sistemas socio-ecológicos, nuestras comunidades, es la resiliencia. Entendemos por resiliencia la capacidad, inherente a cualquier sistema, de absorber los choques externos y reorganizarse mientras se produce el cambio, de manera que el sistema mantiene esencialmente la misma función, estructura e identidad[1].

Existen evidencias científicas, como el informe sobre los límites del equilibrio planetario[2], promovido por el Stockholm Resilence Centre, que nos demuestran que nuestro sistema socioeconómico está sobrepasando la capacidad de carga de nuestro planeta alterando gravemente el sistema Tierra. Consecuencias actuales de esta relación disfuncional dominante entre la sociedad industrial y la naturaleza, son el cambio climático, la desaparición acelerada de la diversidad cultural y natural del planeta, y con ello la disminución alarmante de la resiliencia, y las crisis sociales y económicas asociadas.

Efectivamente, el hambre extrema en el cuerno de África, la catástrofe de las centrales nucleares en Japón, el gran aumento de las desigualdades sociales, el crecimiento poblacional, el agotamiento de los recursos, el cambio climático, etc. son parte de una misma crisis. Una crisis de sostenibilidad global, y de percepción de la realidad, que tiene su origen en el desarraigo con la naturaleza y en el consecuente ímpetu de nuestra sociedad por controlarla. Una sociedad basada en el crecimiento acelerado y el consumismo desmesurado de todo tipo de recursos. Por ello, la recuperación de un equilibrio global pasa por la reconstrucción de resiliencia socioambiental mediante el decrecimiento consciente de nuestras economías y la relocalización de nuestros modos de vida, y para conseguirlo es necesario transformar nuestra relación con el entorno natural, con los otros y con nosotros mismos. Lo que implica, como nos indica el filosofo Jordi Pigem, una transición cultural, es decir un cambio de mentalidad y valores[3].

Una sociedad adicta al petróleo

Sin petróleo barato no estarías leyendo este artículo ahora. No se podrían haber escrito estas palabras en un ordenador y no se podría haber impreso la revista que tienes ahora en tus manos. La mayoría de cosas a nuestro alrededor dependen del petróleo barato para su manufacturación y transporte: nuestros muebles, nuestro entretenimiento, nuestra comida, nuestras medicinas, nuestra casa,… Efectivamente, nuestro bienestar y riqueza económica están directamente relacionados con el petróleo y es justamente esta gran adicción por la poción mágica de nuestros tiempos la que nos hace tan vulnerables.

El pico de producción del petróleo o peakoil, punto a partir del cual disminuye su producción, significa que a partir de ese momento la disponibilidad va a ir reduciéndose de manera gradual pero continua. Atendiendo al comportamiento de los yacimientos actuales y de los nuevos descubrimientos petrolíferos, los diferentes estudios científicos lo sitúan entre el 2007 y el 2015[4]. Sin embargo, en este caso, lo verdaderamente importante no es la fecha exacta, dado que se trata de un hecho inevitable, sino el hecho de que ocurrirá pronto y aun no hemos empezado ni a pensar realmente en ello ni a organizarnos para ello. En palabras del investigador Richard Heinberg, el peak oil, debido a nuestra extrema dependencia del petróleo, a su demanda creciente y a que no hay perspectivas de encontrar un sustituto mejor, se trata del mayor reto social y económico desde la revolución industrial[5].

El mundo está cambiando; caminemos juntos

Albert Einstein decía que “los problemas no pueden resolverse con la misma visión que los creó”. Siguiendo ese cambio de mentalidad existen un cada vez más amplio abanico de iniciativas y movimientos, que trabajan a diferentes escalas y con diferentes enfoques por un objetivo común: la transición hacia un modelo de desarrollo social y ambientalmente justo y sostenible. Cooperativas de consumo, centros sociales, el movimiento del Decrecimiento[6], o el movimiento Transition Towns[7] son sólo algunos ejemplos. Sin embargo, hasta ahora, la dispersión de estos movimientos y a veces su estrecha mirada ha hecho que, en vez de trabajar conjunta y complementariamente, se aislasen perdiendo así gran parte de su fuerza y alcance. Por todo ello, en estos momentos cruciales de la historia, resulta imprescindible ampliar esa mirada viendo la problemática socioambiental desde una perspectiva sistémica, buscando la manera de conectarse y colaborar, aumentando así la masa crítica y favoreciendo el aprendizaje entre unos y otros.

Justamente ese enfoque inclusivo e integral es el que persigue el Movimiento de Transición y uno de los aspectos que lo emparenta con el reciente Movimiento del 15M. Con un carácter eminentemente práctico y propositivo el Movimiento Transition Towns, que se centra en las problemáticas interrelacionadas del pico de producción del petróleo y el cambio climático, y que enfoca su respuesta hacia la reconstrucción de resiliencia comunitaria, está sabiendo ejercer de paraguas y pegamento de forma que iniciativas muy diversas trabajen conectadas y comiencen juntas el proceso de cambio.

El concepto de transición

El concepto de transición parte del intento de aplicar el diseñó de la permacultura[8] a asentamientos y ciudades. Su germen aparece en el 2005 con el proyecto Kinsale 2021[9], producto de un curso bianual de permacultura impartido por Rob Hopkins, posterior cofundador del movimiento Transition Towns. Dicho proyecto piloto supuso el primer intento de llevar a cabo un plan participativo e integral de descenso energético (EDAP[10]), en el que se trabajaba visionando un futuro positivo y autosuficiente en un mundo sin petróleo, para la población sudirlandesa de Kinsale. Poco después, se creaba en Totnes, un pueblo del suroeste de Inglaterra, la primera iniciativa en transición, Transition Town Totnes[11].

Desde ese momento, e impulsadas por la posterior creación de la Transition Network[12] (Red de iniciativas en Transición) y la publicación del Transition Handbook[13] (Manual para la Transición), las iniciativas en transición han ido emergiendo y evolucionando en todo el mundo a partir del trabajo a nivel comunitario, y con las siguientes premisas:

  • Que la vida con un descenso dramático del consumo energético es inevitable y, por tanto, mejor prevenir que ser cogido por sorpresa.
  • Que la falta de resiliencia social actual hace que en estos momentos nuestras comunidades no estén preparadas para afrontar los choques que provocará el pico de producción del petróleo.
  • Que debemos actuar colectivamente y debemos hacerlo ahora.
  • Que dando rienda suelta a la creatividad de la comunidad podemos proactivamente diseñar nuestro descenso energético y construir modos de vida más interrelacionados y ricos que reconozcan los límites físicos de nuestro planeta.

Un reto colectiv0

Efectivamente la transición es un gran reto colectivo que implica actuaciones a muy distintos niveles. Jóvenes y mayores, instituciones, comerciantes y sociedad civil, en general, deben actuar conjuntamente dando rienda suelta a su creatividad, y justamente ese es uno de los grandes logros del movimiento de transición: conseguir, mediante la creación de redes, el uso de dinámicas participativas, el ejemplo práctico y el visionado conjunto de un futuro posible y mejor, la paulatina inclusión de los diferentes actores en el proceso de cambio.

El movimiento de transición nos enseña lo importante que es asociar imágenes, para así tener una visión clara sobre cómo queremos que sea nuestro futuro. ¿Qué pasaría si en vez de imaginarnos un futuro lleno de desastres y catástrofes le diésemos la vuelta y lo viésemos como un futuro lleno de extraordinarias oportunidades?. Oportunidades de reinventar, repensar y reconstruir un futuro abundante en tiempo, en salud y en felicidad. Un futuro más local, comunitario y autosuficiente. Para ello como nos indica Rob Hopkins[14], es necesario crear nuevas historias y mitos que nos permitan avanzar en las próximas décadas, como por ejemplo de la ciudad que tiene su propia moneda o del pueblo que cambia los aparcamientos de coches por huertos comunitarios. En definitiva, historias de la comunidad que descubre que vivir con menos es vivir mejor.

Autoorganización

Cada iniciativa de transición, formada por gente corriente, como tú y como yo, se autoorganiza, mediante la creación de grupos de trabajo autónomos, sobre aspectos diversos como alimentación, educación, energía, psicología del cambio, etc. A partir de ahí las iniciativas ponen en práctica todo tipo de soluciones, creíbles y adaptadas a su contexto, para disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero y recuperar la resiliencia de su comunidad: huertos urbanos, sistemas de trueque y monedas locales, talleres de reciclaje y recuperación de saberes tradicionales, proyectos de bioconstrucción y aislamiento de casas, creación de bancos de semillas, asesorías de vulnerabilidad al petróleo para los comercios, proyectos sobre energías renovables, cuentos de transición, ferias ecológicas, guías de comida local, plantación de árboles frutales, o la creación de un plan integral de descenso energético (EDAP).

La evolución del Movimiento de Transición

El movimiento de transición es un movimiento joven y en pleno crecimiento. Continuamente, de manera viral y autoorganizada, nuevos grupos locales se adhieren a la idea de comenzar la transición por todo el mundo. Actualmente, aunque la mayoría de iniciativas se encuentran en países anglosajones, como Reino Unido, Irlanda, USA, Australia o Nueva Zelanda, ya hay grupos en casi 40 países. Algunos ejemplos son: Japón, Chile, Portugal, Francia, Finlandia, Alemania, Italia o España. A día de hoy existen ya cerca de 400 iniciativas oficiales y más de mil que están empezando a trabajar en ese mismo camino. Existen pueblos, barrios, ciudades, islas, penínsulas y bosques en transición, cada uno con sus propios proyectos, con su propia personalidad. Continuamente surgen nuevas publicaciones y películas, como la reciente In Transition 2.0., en torno al movimiento Transition Towns, consiguiendo que el concepto de transición, hace un par de años casi desconocido, hoy día esté de total actualidad.

En España, el movimiento de transición se encuentra en sus inicios y en plena expansión. El reciente y exitoso primer Encuentro Ibérico de Transición[15] celebrado del 20 al 22 de abril en Zarzalejo, Madrid, en el que participaron más de 130 personas de todo el estado, es prueba de esa efervescencia. Además la wiki para el movimiento de transición en habla hispana[16], publicaciones como “De la idea a la acción: aprendiendo del movimiento Transition Towns”[17] o la emisión de documentales como “Pueblos en Transición”[18], han ayudado de manera muy importante al mejor conocimiento del movimiento y a su dispersión por el territorio. Actualmente existen grupos de trabajo en torno a la transición en unas 30 localidades españolas: Barcelona y Vilanova i la Geltrú, Zarzalejo (Madrid), Mahón, Vitoria Gasteiz, Coín (Málaga), Jerez, la universidad de Santiago o Valencia, son solo algunos ejemplos.

El concepto de transición, como quedó en la última conferencia internacional sobre Transition Towns que tuvo lugar en Julio del 2011[19], está en continua evolución. Participantes de 12 países y debates sobre activismo y transición, sobre la necesidad de incluir la crisis financiera entre uno de sus objetivos, la adaptación de sus principios a contextos de pobreza como las favelas de Brasil, o la discusión de todo lo sucedido en las plazas europeas[20], mostraron la abertura de un movimiento que está sabiendo adaptarse a nuevos contextos y realidades.

15M y Movimiento de Transición

Mención especial en el momento de cambio que vivimos actualmente, tiene el despertar que ha supuesto el movimiento 15M[21]. Hace justo un año las plazas de España y de otros países del mundo se llenaron de gente de todo tipo, proclamando de manera masiva y pacífica su indignación frente a un sistema injusto, dominado por bancos, grandes empresas y gobiernos corruptos. Y, ¿qué mejor manera de hacerlo que con el ejemplo? Niños, jubilados, estudiantes, trabajadores y parados, que dejando de lado sus pequeñas diferencias se pusieron manos a la obra para diseñar y construir a través de la creatividad, la cooperación y la autoorganización, pequeñas comunidades semi-autosuficientes en el centro de las ciudades. Comedores, populares, cuidado sanitario, múltiples grupos de trabajo, guarderías, huertos, el uso de la democracia participativa y horizontal o de los principios de la permacultura, o las múltiples actividades culturales, fueron claros ejemplos de que la gente quiere un modelo de vida diferente y que es posible. ¿Acaso no es este un ejemplo increíble de transición?

Lo sucedido en tantas plazas, y que ha vuelto a revivir durante el fin de semana del 12 al 15 de Mayo del 2012, demostrando que está más activo que nunca, se trata de un gran experimento de transición social, que pese a lo efímero, a puesto a la sociedad de muchos países en plena efervescencia. Pero ¿cómo continuar este cambio? No existen respuestas concretas y evidentemente dependerá de cada lugar y situación, pero lo que está claro es que el movimiento de transición puede tiene un papel crucial en este proceso global de cambio, aportando su visión, metodologías y herramientas, para canalizar constructivamente la indignación actual.

Por un cambio de paradigma

Sabemos que la recuperación de un equilibrio global pasa por la reconstrucción de resiliencia mediante el decrecimiento consciente de las economías, la relocalización de nuestros modos de vida y la reconexión con el medio natural, y que para ello es imprescindible un gran cambio cultural. Donella Meadows nos explica en “Leverage Points–Places to Intervene in a System”[22], que el punto clave en el que hay que actuar para que cambie un sistema es en el cambio de paradigma, es decir aquellas ideas compartidas y asunciones que dan forma a la cultura, que la guían. Cambiar el paradigma consumista actual por el paradigma del “menos es mejor”, el de la sostenibilidad, supone un reto inmenso que no puede esperar.

Con ese objetivo y centrándose en el declive del petróleo y en la necesidad de vivir de manera más autosuficiente, el movimiento de transición nos llama a actuar colectivamente, de manera creativa y huyendo del catastrofismo. Nos invita a reaprender y a cambiar nuestros valores: la competitividad por la cooperación, el individualismo por la comunidad, lo lejano por lo local. Nos infunde ánimo para que conjuntamente visionemos y diseñemos nuestro futuro. Nos explica que esta ilusionante, aunque larga, transición de paradigma puede ser increíble. Y nos dice que definitivamente hay que de dejar las diferencias de lado y ponerse ya manos a la obra porque es el momento de pasar todos juntos de la indignación a la acción.

Juan del Río

[1]Walker, B., Hollinger, C.S., Carpenter, S.R. and Kinzing, A. (2004) “Resilience, Adaptability and Transformability in Social-ecological Systems” Ecology and Society.9 (2) p.5.

[2]Rockström, Johan; W. Steffen, K.; Noone, [et al.] (2009). “Planetary Boundaries: Exploring the safe operating space for humanity”, Ecology and Society 14(2), p 32.

[3]Pigem, J. (2010) “Revalorar el món: els valors de la sostenibilitat” Consell Assessor per al Desenvolupament Sostenible de Catalunya.

[4] Datos del Oil Depletion Analysis Centre. (http://www.odac-info.org). Mirar también: http://www.hubbertpeak.com/

[5]Heinberg, R.(2003) “The Prty’s Over, War and the Fate of Industrial Societies”. New Society Publishers.

[6] www.decrecimiento.es

[7] www.transtiontowns.org

[8]Holmgren, D. (2003). “Permaculture: principles and pathways beyond sustanaibility”.Holmgren Design Services.

[9]http://transitionculture.org/wp-content/uploads/kinsaleenergydescentactionplan.pdf

[10]Energy Descent Action Planning

[11]http://www.transitiontowntotnes.org/

[12]http://www.transitionnetwork.org/

[13]Hopkins, R. (2008). “The Transition Handbook.From oil dependency to local resilience”.Totnes. Green Books.

[14]http://www.ted.com/talks/lang/spa/rob_hopkins_transition_to_a_world_without_oil.html

[15]http://movimientotransicion.pbworks.com/w/page/47282340/1er%20ENCUENTRO%20IB%C3%89RICO%20DE%20TRANSICI%C3%93N

[16]http://movimientotransicion.pbworks.com

[17]Del Río, J. (2009) “De la idea a la acción: aprendiendo del movimiento TransitionTowns” Máster en Sostenibilidad de la Universidad Politécnica de Catalunya. Se puede descargar en: http://movimientotransicion.pbworks.com/f/De+la+idea+a+la+acci%C3%B3n%3B+Aprendiendo+del+Movimiento+Transition+Towns+-+Juan+Del+R%C3%ADo.pdf

[18]http://www.rtve.es/television/20100208/escarabajo-verde-pueblos-transicion/317064.shtml

[19] http://www.transicionsostenible.com/conferencia-internacional-de-transition-towns.htm

[20] http://www.youtube.com/watch?v=80UdS9WuQXA

[21] http://tomalaplaza.net/

[22]Meadows, Donella (2009).“Leverage Points–Places to Intervene in a System”.London. Earthscan.

Curso de Ecología Profunda – «El Trabajo que Reconecta» de Joanna Macy

09 May
por Transición Sostenible, en la categoría Blog, Eventos   |  4 Comentarios

Por primera vez el “Trabajo que Reconecta” llega en castellano al Estado Español.

Apenas conocida en Catalunya y en el estado Español la “Ecología profunda” (Deep Ecology) nos lleva a descubrir las causas profundas de la degradación de la Naturaleza y de las personas. Término acuñado en 1973 por el filósofo noruego Arne Naess la ecología profunda considera a la humanidad como parte de su entorno, proponiendo cambios culturales, políticos, sociales y económicos para lograr una convivencia armónica entre los seres humanos y el resto de seres vivos. Basándose en ese concepto, el reconocido mundialmente “Trabajo que Reconecta” de Joanna Macy tiene por objeto abrir el campo de recursos espirituales y psicológicos que necesitamos para hacer frente a la situación mundial actual.

¿Quien es Joanna Macy?

Doctora en filosofía, especializada en budismo, teoría general de los sistemas y ecología profunda. Importante figura de los movimientos por la paz y la justicia social y ambiental. Joanna es además una de las fundadoras de la Ecofilosofía y de la Ecopsicología. Desde hace más de treintena de años, miles de personas han participado en sus cursos, y su metodología ha sido adaptada ampliamente en contextos escolares, ciudadanos y asociativos. Su exitoso trabajo ayuda a transformar la desesperación y la apatía frente a la crisis ecológica y social, en una acción constructiva y colaborativa, revelándonos una nueva visión del mundo que nos libera de los prejuicios y actitudes que amenazan la vida sobre la tierra.

Más información en: www.joannamacy.net

¿Quien imparte el taller?

Claire Carré, como facilitadora principal.

Claire Carré conoció la «Ecología Profunda» en Irlanda en el 1989. Apasionada por la obra de Joanna Macy, participó en sus cursos. Facilita talleres desde el 1994. En 2007, creó la asociación «Roseaux Dansants» (cañas danzantes) para promover el Trabajo que Reconecta en los países francófonos. Además, ejerce varias actividades profesionales artísticas :  danza, mimo, títeres, técnicas somáticas… y da clases  de «movimiento y conciencia del cuerpo» en la universidad París-8.

Claire, asocia la práctica del Trabajo que Reconecta con la exploración corpórea y sensorial, para dar a experimentar en sus cursos el fundamental vínculo entre psique, cuerpo y tierra.

Anne Amblès, como cofacilitadora.

Anne Amblès, ex-profesora de español, se dedica al desarrollo local sostenible, especialmente en  capacitación ciudadana, resiliencia (de empresas, grupos u territorios) y democracia participativa.

Utiliza técnicas de animación e inteligencia colectiva muy eficientes (asociando creatividad, interactividad, articulación entre mente emociones y cuerpo), inspiradas en varias culturas. Sigue profundizando en la ecología personal y relacional y lo que hace posible la convivencia y la cooperación más genuinas.

*Ambas son facilitadoras y formadoras oficiales de Transición (movimiento internacional de preparación entusiasta de un porvenir sobrio en energía fósil y más acogedor que el presente) y les encanta co-facilitar.

A quien está dirigido

Principalmente a todas las personas interesadas en potenciar la creatividad, experimentar y profundizar nuestra relación de interdependencia con la naturaleza y reforzar su eficacia para preparar colectivamente un futuro sostenible. A activistas, ecologistas y todo tipo de personas que trabajan en la transición hacia un modo de vida más reconectado con la naturaleza y que necesitan potenciar y desarrollar su cambio interno.

Objetivos del curso

  • Proporcionar a las personas la oportunidad de experimentar y compartir con otros sus respuestas más íntimas sobre la condición actual de nuestro mundo.
  • Replantear el dolor por el mundo como prueba de tu interconexión en la red de la vida, y por lo tanto del poder para participar en su curación.
  • Trabajar diferentes conceptos e ideas tales como teoría de sistemas y ecología profunda.
  • Proporcionar métodos mediante los cuales las personas puedan experimentar su interdependencia con la naturaleza, su responsabilidad y la inspiración proveniente de las generaciones pasadas y futuras así como de otras formas de vida.
  • Trabajar para que la gente pueda abrazar el “Gran Cambio” como un desafío que es plenamente capaz de cumplir y como un privilegio que se puede tomar la alegría.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Que aprenderéis

  • Reconectareis con la naturaleza.
  • Reforzareis vuestras capacidades para hacer frente a la crisis socioambiental actual.
  • Conectaréis con emociones profundas
  • Ampliaréis vuestra visión del tiempo y de las interacciones entre los seres vivos de ayer, de hoy y de mañana.
  • Comprenderéis mejor diferentes mecanismos emocionales, adquiriendo nuevas técnicas de desarrollo emocional y corporal.
  • Descubriréis nuevas maneras de relacionarse dentro de un grupo.
  • Trabajareis vuestra transición interior.

Cuando y donde tendrá lugar

El curso tendrá lugar los días 29, 30 de junio y 1 de julio de 2012. Comenzará a las 16h del viernes 29 y finalizará aproximadamente a las 18h del domingo 1 de julio.

Se realizará en Mas Franch, un proyecto comunitario de transformación social y ecológico, autogestionado y con larga experiencia y recorrido. Situado en la región de La Garrotxa en Gerona, se trata de un lugar idílico y lleno de naturaleza. Más información sobre el lugar, instalaciones y como llegar en: www.masfranch.org 

Alojamiento y comidas

El alojamiento con pensión completa se realizará en Mas Franch que cuenta con todas las instalaciones necesarias, incluyendo piscina natural y un entorno privilegiado. Todas las comidas serán vegetarianas incluyendo huevos y lácteos. Si existen necesidades específicas se ruega se comunique con antelación.

Idioma

El curso se realizará en castellano.

Inscripciones

La tarifa está calculada en función de los gastos del curso, la más económica posible, teniendo en cuenta que los formadores vienen desde Francia. Incluye los 3 días de curso y dos noches en Mas Franch con pensión completa.

   · Hasta el 1 de Junio: 205€

   · A partir del 2 de Junio: 225€

   · A partir de 20 inscritos, se ofrecerán becas por un importe de 50€.

(Se confirmarán plazas con becas el 18 de Junio – gracias por escribirnos un email si estáis interesados por las becas)

Si traes a una persona al curso, conseguirás un 10% de descuento adicional sobre el precio (menos

las becas).
Posibilidad de pagar una parte del curso en Ecos (hasta un 10%, en moneda local/complementaria vía

CES), contáctanos si te interesa!

*Inscripciones y más información escribiendo a formacion@transicionsostenible.com

* Flyer curso ecología profunda – El Trabajo que Reconecta – Transicion Sostenible 2012


En los bordes del I Encuentro Ibérico de Transición

30 Abr
por Transición Sostenible, en la categoría Eventos   |  9 Comentarios

Mirando desde detrás y delante de un objetivo

Jueves 19 de abril. Una furgoneta amarilla, como el tractor, conduce en dirección Zarzalejo desde el Mediterráneo catalán. Siete personas expectantes la habitan, con sus inquietudes, sus sueños y sus deseos respecto a los días que seguirán.

Amanece el día 20, ya en destino tras el peregrinaje que nunca termina. Un albergue pequeño, que huele a cerrado. La lluvia empapa el granito madrileño. Se esperan al menos 90 transcicionistas de diversas partes de España, y más allá (acabaremos sobrepasando los 100 sobradamente). La organización se autoorganiza (aunque en ocasiones se desorganice algo, somos sistemas complejos y el caos también tiene su papel), distribuyendo espacios, preparando rincones para compartir miradas, limpiando, … llegan los primeros voluntarios de Zarzalejo en Transición, con equipos de sonido, pan, flores, sonrisas; tal una ofrenda, una celebración. Al fin y al cabo, eso vamos a vivir en un fin de semana intenso: mucho trabajo, reflexión, creación, y a su vez juego, baile, comida, alegría.

Poco a poco, gotita a gotita a ratos, aparece Valladolid en transición. Jerez. Argelaguer. Menorca. Coín. La Palma. Aranjuez. Valencia. Guadalajara… se va engranando la península y las islas, engarzándose en una trama que va a ser acogida (o a acoger, así es afuera como es adentro) en este espacio que a medida que avanza el día va recibiendo algunos rayos de sol.

Al cuello, un sencillo trozo de madera, como la concha del caminante, recordándonos nuestra conexión con la naturaleza.

¡Y empezamos! Aunque realmente, ya comenzamos dando el primer paso más allá de nuestra puerta. Empezamos dándonos la bienvenida formalmente, comentando el programa, las cuestiones logísticas, pidiendo la colaboración de todas y todos porque a fin de cuentas esto sólo será posible en cooperación. Pero la primera bienvenida ya le hemos recibido de dos mujeres sonrientes a la entrada, y nos la daremos de nuevo en el exterior, moviéndonos por el entorno, reconociéndonos y reconociéndolo, encontrándonos mutuamente, contactando nuestras miradas, explicándonos unos a otros qué hacemos ahí, qué esperamos de estos días, quiénes somos, de dónde venimos… y esperando construir juntas y juntos el adónde vamos desde aquí.

Las Iniciativas se presentan, explican qué han hecho, sus visiones, sus dificultades. Es una primera cata, una pequeña pincelada; con las horas se irán poniendo más cuestiones sobre la mesa. Los posters contribuyen a decorar más la sala, ese espacio que tan desangelado parecía a primera hora, y que va cogiendo brillo exponencialmente. Nos metemos de lleno en harina compartiendo en dúos aspectos diversos de la transición.

Emilio Mula, de Transition Town Totnes y uno de los responsables de In Transition 2.0 nos regala la premiere oficial en castellano del documental *, tras una cena degustación geográficamente diversa, compartida y ricamente saboreada. Un honor y un placer poder compartir el visionado con él.

Sábado será día de talleres en paralelo, aportados por Logroño, Santiago, Jerez, Valencia, Zarzalejo y la asociación Gaia Tasiri, y el inicio del trabajo encaminado a formalizar la red. Pero parte del cansancio empieza a notarse, y algunas nos perdemos el debate sobre la situación del movimiento en transición en España (¡y hasta el almuerzo!), todo y que las voces del Coro Libero nos animan a levantarnos de nuevo, recargadas las energías. Eso sí, nos han comentado que había muchos peces en la pecera…

Y el ponerse en marcha no es para menos, porque vamos a contar con Filipa Pimentel, portuguesa afincada en Bruselas y actualmente coordinadora internacional de la red de hubs nacionales en transición. Es decir, encargándose de facilitar apoyo a las redes nacionales de iniciativas en transición; nos cuenta experiencias de la red de Portugal, su decisión de formar parte y contribuir a la Transition Network de esta manera, pero sobre todo se ofrece ella misma, regalándonos durante dos días su sonrisa y su cariño.

Tras compartir con Filipa, damos paso al Foro Abierto (Open Space), una dinámica de trabajo en grupo muy potente y libre, para contribuir a buscar respuestas a la pregunta de qué necesidades tienen las iniciativas españolas que una red podría ayudar a satisfacer. Se generan temas y grupos espontáneamente, la gente puede moverse libremente de unos a otros. Optamos por ser mariposas y observar. Cuántas propuestas se van plasmando… Nos servirán el día siguiente como punto de partida para el grupo que decide participar en darle forma a la red.

Rocío Madreselva, Tambores con corazón y Rogelio con su guitarra ponen la guinda y un trozo de pastel a un día de agenda completa. La celebración también es necesaria, y la música y los ritmos nos hacen vibrar, latir… y bailar!

Domingo. Queda poco ya. Últimas rondas de talleres. Fotos de grupo, y ronda de fotos para la campaña de micromecenaje que contribuya a la traducción de The Transition Companion al castellano. Buena gente disfrutando de la biodanza, proyección de parte de la película Voices of Transition, y un pequeño grupo reunido y comprometido en trabajar para constituir la red nacional española de iniciativas en transición. Poco tiempo y mucho por comentar: se generan equipos para trabajar en la red virtual, y nos emplazamos en dos meses para reencontrarnos, habiendo compartido y debatido la experiencia con los respectivos nodos locales, para seguir tejiendo una telaraña que se nota ya viva y brillante, recubierta de pequeñas gotas que reflejan la luz.

El albergue se ha convertido en un lugar acogedor, divertido, luminoso. Cambiamos nosotras y nuestro entorno cambia.

Un último almuerzo. Recogidas. Abrazos. Promesas de visitas mutuas. Y el retorno. Repasar las fotos recordando los momentos vividos.

Una semana ha pasado desde las despedidas. Tras el bajón emocional y energético que conlleva la separación, es el momento de dar gracias.

La comida, espectacular (a mí no me apasiona el arroz con leche, pero sabía a gloria concentrada). Las mujeres, los hombres y niñ@s de Zarzalejo, encantadores, dispuestos a todo, sin su implicación y su cariño el I Encuentro tal y como lo hemos vivido no habría sido posible. La organización, Juan, Emilio, Susana, Javier y Antonio, horas y energía y pasión volcada en que de la idea se pasara a la acción, ubicuos, inmanentes y trascendentes a la vez. A Filipa, por ser y estar allí. A todas las personas, que, individualmente o en representación de sus iniciativas locales, trabajan en su día a día para ser el cambio y estos días han sembrado más semillas para hacerlo posible. Sólo cabe desear luz y agua y suelo fértil. A Rafa, Joan, Toni, Mathieu, Josep, Stephan, Aniol, Tomás, Loli y Andrea, Paco, Pepe, Edurne, Judith y David, Cristina, Jorge, Paco Heras y María Sintes, Alejo, Raúl, Javier, Susana, Cecilia, Miguel, Lucía, Sergio, …

No me salen todos los nombres. Y nunca puedes hablar con todo el mundo lo que querrías.

Sin embargo, a todas y todos, gracias. También a quienes no habéis podido acercaros, pero nos habéis acompañado con el corazón, se notó vuestra presencia.

Mucho material generado, ideas compartidas, documentación, mapas políticos y mentales, fotografías, vídeos, audios… van siendo recopilados y compartidos en diferentes canales (Flickr, Youtube, Facebook, Wiki…). Y más compañeras van aportando su mirada y su sentir, escribiendo su vivencia en estos tres días en que iniciamos el camino juntas.

Red Sostenible y Creativa de Valencia

Fuengirola-Mijas en Transición

Argelaguer en Transició

Asociación Gaia Tasiri

Cómo nació el cartel del Encuentro

El Encuentro en Noticias Positivas

Por supuesto, es un hasta pronto. El camino sigue.

* Nota: se realizarán proyecciones de In Transition 2.0 en el Espacio Transición de Biocultura Barcelona la próxima semana

Paul Gilding: La Tierra está llena

17 Mar
por Transición Sostenible, en la categoría Blog, Videos   |  Sin comentarios

¿Hemos agotado todos los recursos? ¿Hemos usado todo el espacio habitable de la Tierra? Paul Gilding sugiere que sí, y que existe la posibilidad de unas consecuencias devastadoras, en una charla con partes iguales de terror y, curiosamente, esperanza.